Prisión perpetua: condenaron a un capo narco, archienemigo de la temible banda de Los Monos

El capo narco Esteban Alvarado, archienemigo de la temible banda de Los Monos, fue condenado a la pena de prisión perpetua por comandar desde la prisión una asociación ilícita dedicada a cometer homicidios, extorsiones, amenazas y ataques a balazos contra edificios judiciales entre el 2012 y 2019 en la ciudad santafesina de Rosario.

Alvarado fue hallado penalmente responsable de ordenar el homicidio del prestamista Lucio Maldonado en 2018 y también por cinco hechos de lavado de activos, amenazas y balaceras a edificios judiciales como jefe de una asociación ilícita.

La misma decisión también alcanzó a otros cuatro acusados, mientras que dos imputados fueron condenados a seis y ocho años de prisión por lavado de dinero.

El tribunal que condenó al clan Alvarado estuvo integrado por Alejandro Negroni, Patricia Bilotta y María Isabel Mas Varela.

Según se desprende del fallo, además de ser señalado como líder de la banda narco, Alvarado fue condenado por instigar el asesinato del prestamista Lucio Maldonado, con los cargos de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y por concurso premeditado de dos o más personas.

El fiscal definió que esa asociación ilícita era conocida como “la banda de los rosarinos” y que Alvarado tenía el mayor peso dentro de esa estructura criminal. Incluso, al detectar diálogos que eran alusivos a la comisión de múltiples delitos violentos, remitió copia las grabaciones de escuchas telefónicas a la Justicia de Santa Fe, aunque no se avanzó con este material.

Alvarado también fue considerado instigador de amenazas coactivas, entre ellos, ataques a balazos a edificios judiciales y el envío de una cabeza de perro a Marina Mansilla, funcionaria del Ministerio Público Fiscal. A ello se sumaron, al menos, cinco hechos de lavado de dinero. Además de cumplir prisión perpetua, deberá pagar una multa de $316.173.048.

Tras conocerse la sentencia de cadena perpetua para Alvarado y los principales acusados, los fiscales que llevaron adelante la causa ponderaron el fallo, pero remarcaron que el crecimiento de la organización también fue posible por acciones y omisiones estatales.

“La organización tuvo un componente estatal que le permitió funcionar”, señalaron.

“Nosotros tratamos de demostrar que esto era una organización que había crecido en Santa Fe, en los últimos 10 años, al amparo de un montón de posibilidades gracias a distintas maniobras, actividades y filtraciones en la policía y demás. Por eso creo que es muy destacable el fallo, porque en este juicio se demostró que hubo un componente estatal muy importante, que le permitió a esta organización funcionar”, resaltó el fiscal Luis Schiappa Pietra.

En cuanto a Mauricio Laferrara, los jueces entendieron que fue coautor del crimen del prestamista y responsable del homicidio de Cristian Enrique. Por el homicidio de Lucio Maldonado también fueron sentenciados a cadena perpetua Facundo Almada, Matías Ávila y Germán Fernández.

En tanto, Miguel Ángel Grecci Hazzi, recibió le pena de 4 años y 8 meses de prisión efectiva y un multa de $ 76.500.000 por su participación en la asociación ilícita y por dos hechos de lavado de activos.

Por su parte, Damiana Ghirardi fue condenada a 3 años de prisión condicional y a pagar una multa de $ 46.000.000 por un hecho de lavado de activos en carácter de coautora. En tanto, en otro expediente que tiene en la mira a la misma organización criminal, el juez federal 4 de Rosario, Marcelo Bailaque, le otorgó la prisión domiciliaria con tobillera electrónica a Rosa Natalí Capuano, exesposa de Esteban Lindor Alvarado, detenida hace quince días en una causa por presunto lavado de bienes por $ 10.000.000, según informaron fuentes judiciales.

El planteo fue realizado en base a la que la mujer es el único sostén de un hijo menor, ya que Alvarado está detenido desde febrero de 2019.

En 2013, en una causa tramitada en el juzgado bonaerense de en San Isidro, se condenó a Esteban Alvarado a seis años y medio de prisión, pena que cumplió en 2018. Dicha sentencia la transitó primero en el penal de Campana y después en el de Urdampilleta.

Se presume que fue allí, tras las rejas, donde comenzó a generar un “emporio de empresas” que derivaron en las acciones que fueron condenadas ayer, según indicaron los fiscales Luis Schiappa Pietra y Matías Edery.

La investigación de los fiscales llevó tres años y el juicio había empezado el 21 de febrero pasado. Sin embargo, el final de este debate oral no será el último tribunal por el que circulará Alvarado este año, ya que desde mediados de marzo es juzgado en el Tribunal Oral Federal N° 2 de Rosario por narcotráfico.

Se acusó a Alvarado de movilizar un cargamento de 493 kilos de marihuana que fue secuestrado en un operativo de control el 24 de noviembre de 2017 en General Roca, provincia de Río Negro.

Además, la semana pasada se conoció que la justicia federal también activó una investigación por lavado que lo alcanza a Alvarado y a su expareja. Al igual que su enemigo de Guille Cantero, Alvarado pasa los días entre la cárcel y los tribunales.