Energía y proteínas para todo momento del día. Opciones para comer huevos bien distintos.
1. Hispano Restaurante
Siempre generosa en huevos, la tortilla de Hispano es un gran recomendado del menú.
En este restaurant de auténtica comida española tienen más de 60 años de experiencia. Por supuesto que en su menú no podían faltar los icónicos huevos rotos, que en este caso vienen con champignon y gambas. También hay revuelto gramajo y tortillas varias (española, de papa y cebolla o de verduras).
El revuelto gramajo de Gula tiene gran protagonismo del huevo.
En esta parrilla especializada en ahumados encontramos revuelto gramajo (papas pay, jamón, arvejas y huevo), tortilla de papas y milanesa de bife de chorizo con puré y doble huevo frito. También hay lugar para el huevo duro en la ensalada de zanahoria y huevo o en el clásico de los clásicos: papa, huevo y mayonesa.
Además de grandes cafés y tés, en este café notable también hay espacio para platos con huevo.
La bruschetta en pan de masa madre con palta, huevo cocido a baja temperatura, frutos secos y hierbas frescas nunca falla; tampoco el croque madame en pan de molde con jamón cocido, salsa bechamel y gruyere gratinado, coronado con huevo frito. Además hay sándwiches clásicos como el completo de jamón crudo o cocido, queso, huevo, tomate y lechuga.
Combinaciones irresistibles para el desayuno, el brunch o la merienda, como Passion (salchicha, panceta, huevos fritos, tomates asados y hongos), Pompi (salmón gravlax, huevo poché, alioli de eneldo, hinojo y pan brioche) y Energie (huevos revueltos y mini ensalada). También está el croque madame con jamón, queso, salsa mornay y pan de miga gratinado con huevo frito.
El kachapuri, una creación original de Almacén de Pizzas que se corona con huevo.
Entre las originalísimas pizzas hay una con salsa de tomate, mozzarella, tomates asados y cherry, lomo curado, albahaca y huevo. Y otra de sus creaciones imperdibles son los kachapuri: masas enrolladas rellenas de mozzarella y coronadas con huevo. Pueden ser de cuatro quesos, de espinaca o de cheddar y panceta.
Los huevos revueltos son un must y se pueden pedir con hierbas y queso, con salmón ahumado o en versión APVL (claras batidas con pizca marina). Otros hits son la Avocado Toast con huevo poché, el bagel con huevos revueltos, la milanesa Möoi con huevo soft, la schnitzel de pollo con huevo a la plancha o la sartén de kale, espinaca y huevos con queso.
En Niño Lobo, maridá el mejor café con algún brunch generoso en proteínas.
En la meca marplatense del café también encontramos brunchs como el Flojo de Huevos (pan de masa madre, avo pasta, huevo mollet y prosciutto), Huevos Patrona (papa rosti, salchicha parrillera, huevos rotos y dip picante) y Aguacate (pan multicereal, palta, revuelto de huevos, jalea casera y queso crema), todos con café y shot de jugo de naranja.
Huevos suaves y tentadores, la propuesta de Le Pain Quotidien.
Acá los huevos de campo vienen en versión benedictinos (en pan brioche con salsa holandesa y jamón), pasados por agua (con bastones de pan) o revueltos (con mix de granos antiguos, ensalada, pan de masa madre y jamón o palta). El huevo poché también dice presente en la Avocado Toast, la ensalada de espinaca y brie o la hamburguesa de quínoa morada.
En los locales de Recoleta y San Isidro podemos desayunar una Avo Toast con palta, huevo soft y semillas; un omelette de claras con queso port salut y tomate o unos buenos huevos revueltos. Para almorzar, está la ensalada de salmón ahumado, palta, tomates cherry, huevo soft, brotes, mix de hojas verdes y semillas de girasol.
