El joven cordobés atacado a la salida de un boliche en Punta del Este "evoluciona bien"

CÓRDOBA.- Tomás Lacase, el cordobés de 20 años que fue atacado en la madrugada del domingo en un boliche de Punta del Este y está internado en terapia intensiva, evoluciona bien. Hoy al mediodía le retiraron la asistencia respiratoria.

Julián Baldunciel, su tío, contó que tiene 30 fracturas en el cráneo y en el cuerpo. Corre el riesgo de perder un oído y están atentos a cómo evolucionan dos coágulos que tiene. En contacto con LA NACION dijo: "Evoluciona bien, le retiraron el respirador y respira por sus propios medios".

“Está un poco mejor, es fuerte y le pone ganas pero el cuadro es grave”, señaló más temprano y calificó de “cobarde” al agresor, un abogado mendocino de 29 años que vive en Buenos Aires y que las fuentes policiales identifican como Bernardo Alcanoni.

Después del parte médico del mediodía, el tío afirmó a este medio que "los movimientos y signos en sus extremidades son buenos; le explicaron porqué está internado pero no reaccionó".

Tomás, estudiante de Administración de Empresas, vive con su familia –que viajó a Uruguay- en Villa Allende, a unos 20 kilómetros de la capital cordobesa. Se fue de vacaciones con dos amigos a Punta del Este, donde después se reencontraría con sus padres para regresar a la Argentina el 31 de este mes.

La versión de la familia

El domingo a la madrugada estaba en el boliche Ramses, donde fue atacado. Según el relato que logró armar la familia Lacase, Tomás habría intervenido para separar a un amigo suyo de otro argentino con quien estaba discutiendo.

Cuando se alejaban del grupo, cerca de la salida del boliche, el mendocino cayó sobre él y “lo golpeó hasta que, en el suelo, lo pateó y pisó”.

El cordobés quedó inconsciente en el piso, fue asistido por gente en el lugar y la policía lo trasladó al Sanatorio Mautone, donde está internado. Según Baldunciel, fueron “unos siete” jóvenes quienes atacaron a su sobrino.

La novia del abogado con el que empezó el altercado intentó frenar la locura. Según testimonios, se le habría “colgado” de los hombros para pedirle que dejara de pegar.

La familia de Lacase afirma que el agresor ya está en libertad, después de haber pagado una fianza de US$10.000. Entienden que la decisión sería apelada por el fiscal.