La Angostura: trabajan contra reloj para reabrir la Ruta 40

SAN CARLOS DE BARILOCHE.- Alrededor de 100 personas de diversos organismos y empresas privadas trabajan contra reloj para lograr habilitar entre hoy y mañana una mano de la Ruta Nacional 40 que conecta esta ciudad con Villa La Angostura. Tras el derrumbe ocurrido el pasado 23 de julio, en medio de las intensas nevadas, la región turística quedó prácticamente aislada y afirman que las consecuencias "son notoriamente complicadas para la economía local". El objetivo es tener habilitado el acceso para el fin de semana largo, aunque los trabajos finales demorarían 60 días más.

Pilar Orelogio, coordinadora de Gestión de Vialidad Nacional en la zona del derrumbe, confirmó en diálogo con La Nación que sólo la lluvia podría demorar los trabajos, pero que a más tarde el sábado por la mañana la mitad de la calzada debería estar despejada. Aunque los pronósticos meteorológicos no son muy alentadores, esperan poder avanzar. "Una vez que logremos la apertura, habrá tránsito asistido, pero como son poco más de 100 metros va a ser bastante ágil".

La responsable de Vialidad Nacional descartó que la vibración de los autos pueda afectar los trabajos o generar algún tipo de desprendimiento, ya que "la absorción en esos casos siempre es hacia abajo". De todas formas, aclaró que sólo estará habilitado para tránsito liviano y proveedores, los camiones deberán seguir haciendo la conexión por Pino Hachado.

Ayer personal de Paramassi Andina y efectivos del Batallón de Ingeniería de la VI Brigada de Montaña del Ejército Argentino desarrollaron los trabajos de preparación de la ladera de Brazo Huemul, para poder avanzar con las microdetonaciones fragmentarían y permitirían desprender el principal bloque de rocas que tiene alrededor de 30 metros de alto por 20 de ancho. Hicieron pruebas de resistencia, denominadas "tiros de prueba", para estimar la magnitud de las vibraciones.

Si bien Orelogio consideró que "no hay riesgo alguno para el gasoducto" que pasa a unos 50 centímetros por debajo del área de banquinas, se respetaron una serie de protocolos de seguridad para evitar hacer más vibraciones que las permitidas. Las microdetonaciones se harán con gases y geles especiales traídos desde Villa María, Córdoba, los cuales viajaban custodiados especialmente por móviles de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), y los cuales sólo se trasladan en horarios diurnos.

"Apenas llega el material avanzaremos con dos técnicas diferentes que son complementarias, una se hace con nitrato de amonio, que se coloca en las perforaciones que se fueron haciendo (de alrededor de un metro), y la segunda es con geles expansivos que nos permitirán fragmentar y luego poder remover", precisó Orelogio. Y adelantó que si bien esto permitirá la apertura parcial de la ruta, los trabajos finales de todo lo que es la contención de la ladera demorarán unos 60 días.

Se colocará una malla contenedora para evitar futuros derrumbes. "Son grandes círculos de alambre de acero entrelazados que evitarán cualquier tipo de caída", expresó finalmente Orelogio, quien admitió que "no ha sido nada fácil" el trabajo de estos últimos 20 días. "Desde abajo se veía una cosa, pero desde arriba es otra, fuimos modificando y adaptando el plan para que Villa La Angostura esté finalmente conectada", resumió.

Luego del derrumbe, las conexiones a la Villa fueron a través de catamaranes o de la Ruta de los Siete Lagos, cuya accesibilidad es limitada, situación que claramente impidió la esperada llegada de los turistas. "Las consecuencias son notoriamente complicadas para la economía de la ciudad, estamos pendientes de esta posibilidad porque realmente estamos aislados", dijo a LA NACION Guillermo Caruso, intendente local. Y agregó: "Estamos con muy poca gente, el cerro Bayo está vacío, no tenemos los valores exactos de las pérdidas pero necesitamos recuperar el circuito turístico".