San Cayetano. El pedido especial de Mario Poli para la dirigencia por los más de siete millones de chicos pobres

El arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, encabezó hoy la celebración del Día de San Cayetano, patrono del trabajo en la fe católica, desde el santuario de Liniers y además de pedir por quienes no tienen cómo ganarse el pan en medio de la cuarentena, llamó la atención de quienes "tienen alguna responsabilidad en la dirigencia" para reparar en los siete millones de niños pobres que hay en el país, según las preocupantes cifras que esta semana difundió Unicef Argentina.

"Vamos a pedir que no les falte el pan y una vida digna a todos los argentinos", dijo Poli desde la misa que fue emitida vía YouTube para respetar las medidas de prevención de la cuarentena por coronavirus. Y recalcó: "Muy especialmente pediremos por los 7 millones de chicos pobres con niveles de indigencia que nos avergüenzan y humillan".

El obispo advirtió: "Que nadie se escandalice. Nos debe mover la conciencia a los adultos, a los que tenemos alguna responsabilidad en la dirigencia de hoy (...) Nos tiene que golpear fuerte en el corazón, porque está en juego la vida de una generación de niños, adolescentes y jóvenes que nos va a suceder y son hoy el verdadero tesoro de la Nación, no en cifras, son personas, y sufren y hay dolores y lágrimas".

En ese sentido, reclamó: "Se debe legislar para la vida y nunca para la muerte de nadie. Para que haya trabajo, educación, Justicia e igualdad de posibilidades de desarrollo para todos, en especial para los postergados".

Por otra parte, Poli además de pedir una bendición y trabajo para quienes no lo tienen, pidió especialmente por "los trabajadores de la salud al servicio de los enfermos". El Obispo, en su homilía, dijo: "Los tenemos muy presentes hoy y le pedimos a Dios que no les falten las fuerzas en sus jornadas, que son agotadoras (...) merecen todo nuestro respeto y cordial gratitud por lo que hacen por sus semejantes".