Tomó desde Miami un crucero solo para adultos y quedó fascinada con la experiencia: “Es diferente”

Fuera del amplio abanico de opciones para disfrutar en familia a bordo de un crucero, también han crecido las alternativas que restringen el acceso a los menores de edad para ofrecer entretenimiento y tranquilidad a los adultos. Uno de los cruceros más atractivos con esta condición es el Scarlet Lady, propuesta rebelde de Virgin Voyage.

“Con una combinación de itinerarios caribeños de cuatro y cinco noches, la marca ofrece una experiencia Virgin incomparable con un hotel boutique en el mar inspirado en un mega yate”, así es como la marca busca atraer a los huéspedes. No parece necesario porque, pese a que lleva poco navegando, la oferta diferenciada de sus viajes ha merecido reconocimientos internacionales.

La reportera Lori A. May viajó el verano pasado a bordo del Scarlet Lady y compartió su experiencia en Insider. Su viaje partió desde Miami para después desembarcar en República Dominicana y las Bahamas, el acceso a esta aventura de cinco noches le costó 2711 dólares, que ya incluyen los impuestos.

Por ese precio, reservó una cabina denominada XL Sea Terrace. En el sitio de Virgin, detallan las comodidades de la estadía: terraza con hamaca, doble espacio de almacenamiento, zona de tocador, baño y sala más amplios y pantalla plana. La tarifa incluye propinas, WiFi, bebidas sencillas y cenas especiales.

En su reseña, la mujer, que se define como conocedora de cruceros, describe varios aspectos que la sorprendieron de la experiencia en el Scarlet Lady. En primer lugar, recibió un dispositivo personalizado en lugar de una llave para acceder a su cabina, se trata de una pulsera que servía tanto para identificarse al subir como para pagar los servicios no incluidos.

Otra de las agradables sorpresas fue la comodidad de la hamaca en el balcón, un artículo de descanso que nunca había encontrado en otro crucero. Además, a diferencia de las dificultades que ha experimentado anteriormente para hallar sillas de playa o reposeras junto a la piscina, en este viaje había suficientes como para no tener que luchar por ellas desde el amanecer.

Lori encontró que las piscinas eran más pequeñas de lo que esperaba, pero pudo disfrutarlas porque nunca estuvieron llenas y lo mejor es que durante la noche permanecieron abiertas hasta muy entrada la madrugada. “Mis inmersiones tardías se convirtieron en una de mis actividades favoritas durante este crucero y una gran razón por la que volvería a reservar un crucero de Virgin Voyages”, aseguró en el texto.

El objetivo de su viaje no estaba en la actividad física o los extenuantes entrenamientos, pero se asombró al ver espacios para ejercicio al aire libre y clases grupales enfocadas más en el fitness que en la introducción de un estilo de vida espiritual. Un enfoque que celebró y aprovechó para divertirse.

Además, la reportera destacó que, en lugar del típico buffet, este crucero tiene más de 20 opciones de comida en restaurantes con servicio las 24 horas. En The Galley, los huéspedes pueden comer desde ensaladas hasta hamburguesas y tacos. Los menús son diseñados por chefs con estrellas Michelín.

La sala de juegos con máquinas y videojuegos que trajeron a su memoria sus años de infancia y adolescencia, sumada a la experiencia en los shows interactivos con la guía de una terapeuta sexual, le dieron una perspectiva sobre las alternativas para todos los públicos.

En el sitio de Virgin están disponibles las próximas experiencias a bordo del Scarlet Lady partiendo desde Miami: Riviera Maya, Dominican Daze, Fire & Sunset Soirées.

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