Desconecta. Punto final a tus comidas de Navidad: vasitos de Ferrero Rocher fáciles, pintones y de éxito asegurado
Desconecta. Punto final a tus comidas de Navidad: vasitos de Ferrero Rocher fáciles, pintones y de éxito asegurado

MADRID, 9 Dic. 2025 (Europa Press) -
Las comidas de Navidad siempre piden un cierre dulce, pero pocos quieren liarse con postres que exijan horno o demasiada preparación. Más allá del clásico surtido de turrones, cada vez más ganan terreno las recetas rápidas, vistosas y que pueden dejarse listas con antelación.
Entre ellas, una de las que más está circulando estos días en TikTok es la propuesta del chef Héctor Medina (@elchefkent): unos vasitos de Ferrero Rocher que conquistan por su sencillez y por lo bien que quedan en la mesa.
La receta es simple: base crujiente de galleta, crema suave de mascarpone con nutella y nata bien fría, avellanas picadas y un Ferrero coronando cada vasito. El resultado es un postre individual, elegante y muy fácil de servir, pensado para aportar ese "punto final" que tantas comidas navideñas necesitan sin añadir estrés a la cocina.
INGREDIENTES Y CÓMO PREPARAR LOS VASITOS DE FERRERO ROCHER
Para seis vasitos, Medina propone galletas maría o tostadas, mantequilla derretida para compactar la base y una mezcla fría de mascarpone, nutella y nata semimontada. El toque final lo ponen las avellanas picadas y, por supuesto, un Ferrero Rocher entero en cada ración, que aporta sabor, altura y un punto festivo inmediato.
El proceso es tan sencillo que se puede hacer incluso el mismo día:
- Tritura las galletas que prefieras y mézclalas con la mantequilla derretida.
- Reparte dos cucharadas en cada vasito y presiona para formar una base firme.
- En un bol, mezcla mascarpone, nutella y nata bien fría, y bátelo hasta semimontar.
- Rellena los vasitos con la crema, ya sea con manga pastelera o con cuchara.
- Da unos pequeños golpes para que la mezcla se asiente.
- Decora con avellanas picadas y un Ferrero Rocher por encima.
- Lleva a la nevera al menos una hora para que cojan cuerpo y estén bien fresquitos.
Estos vasitos triunfan porque cumplen tres requisitos clave de cualquier sobremesa navideña: son fáciles de preparar, quedan espectaculares y gustan a casi todo el mundo.
Además, permiten organizar mejor el trabajo en la cocina, se conservan perfectamente en frío y se sirven de manera limpia y ordenada, sin cortar ni emplatar.


