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Comenzó la mayor restauración de la historia del Teatro Colón
Empezó el arreglo del techo, que durará once meses, sin interrumpir funciones programadas
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Despejado y con sol amaneció el domingo. Un buen augurio para el equipo de arquitectos, ingenieros y constructores que ayer, a las 7, comenzó la restauración más importante en la historia del Teatro Colón, cuando falta muy poco para su cumpleaños número cien, en mayo de 2008. El buen clima fue necesario para colocar un techo corredizo provisorio de 6400 kilos sobre el edificio, que permitirá reemplazar cerca de 3000 m2 de chapas de zinc, deterioradas por el paso del tiempo, sin que la lluvia y el viento pongan en peligro el patrimonio atesorado en el interior. Además, posibilitará que, durante los once meses de trabajos, no se interrumpan las funciones previstas en la temporada 2004, que comienza en febrero.
La arquitecta Silvia Fajre, subsecretaria de Patrimonio Cultural del Gobierno de la Ciudad, explicó que "se trata de la primera obra integral de restauración que se realiza en el edificio. En esta etapa, el objetivo es volver impermeable el edificio, primero en la cubierta a dos aguas y en las terrazas planas, y en un futuro cercano en las fachadas, empleando las mismas técnicas constructivas y los materiales originales".
La construcción del Teatro Colón, que duró veinte años (1889-1908), contó con la participación de tres de los arquitectos más importantes de la época: Francisco Tamburini, Víctor Meano y Julio Dormal. El volumen exterior fue revestido en sus cuatro fachadas con piedra París, adornado en estilo dórico en el basamento y compuesto en los niveles altos. La sala es una herradura exquisitamente adornada, famosa en el mundo por ser la más larga y por su excelente acústica. Al Teatro Colón se lo considera, junto con la Casa Rosada y el Palacio del Congreso, uno de los monumentos históricos más representativos de la Argentina.
Espectáculo en la calle
A las 7 se ubicó una grúa de 60 toneladas justo en la esquina de Cerrito y Tucumán, al tiempo que se cortó el tránsito vehicular y peatonal. A las ocho, el público se fue sumando para presenciar el espectáculo que se daba en la calle. A las 11, con la grúa, se sacó el primero de los cuatro pararrayos que coronan el edificio. Cada uno mide nueve metros, pesa 200 kilos y está conformado por un tubo de hierro con ornamentación en zinc. Los especialistas observaron que las flores y copas de adorno estaban bastante deterioradas.
Ya eran las 13 cuando empezó a subirse el primer faldón del techo provisorio, de 8 por 22 metros y 3200 kilos, pero el viento comenzaba a soplar. Dos operarios maniobraron con las sogas para evitar que, mientras la estructura subía, chocara con obstáculos imprevistos, como postes de luz y señales de tránsito. Finalmente, cerca de las 15, quedó afirmada la primera agua en el techo del teatro. Luego, el vehículo se trasladó unos metros hacia Viamonte. Todo se hizo lentamente, porque debajo de la calle están los talleres y depósitos del teatro. Por eso, también, se controló en forma permanente el comportamiento de las estructuras subterráneas.
A las 17 concluyó la colocación del segundo faldón y se abrió Cerrito nuevamente al tránsito. El techo provisorio cubre un veinte por ciento de la superficie por reparar, pero incluye rieles en la base, que le permitirán su desplazamiento a medida que se completen los tramos.
La arquitecta Fajre dijo que, sin contar la obra de ampliación del Teatro, realizada por el arquitecto Mario Roberto Alvarez en los años 70, éste es el plan integral más importante en la historia del Colón. "En el obrador reprodujimos una parte del techo a escala natural para poder probar su comportamiento acústico y de resistencia al paso del agua. La acústica del Colón es perfecta y tenemos que lograr que lo siga siendo", dijo.
Según explicó la funcionaria, al mismo tiempo se realizan trabajos dentro del edificio, de actualización tecnológica (sistemas antiincendio y de control automatizado de escena), y reformas menores, como el comedor del personal, una oficina para el personal de visitas guiadas, la cafetería, una tienda de merchandise, boleterías nuevas y reformas en el patio de carruajes, que lo vinculan directamente con el playón vecino sobre Viamonte, donde se construirá la futura plaza El Vaticano.
"Queremos que el público pueda comprar entradas, tomar un café, adquirir obsequios o preguntar por las visitas guiadas. Queremos hacer un acceso blando y fácil para que se produzca un acercamiento menos formal entre el teatro y la gente", concluyó la funcionaria.
Maravilla casi centenaria
El Teatro Colón
- El Teatro Colón fue inaugurado en abril de 1857. El edificio original se encontraba frente a la Plaza de Mayo.
- El edificio actual data de 1908. Abarca un total de 8202 m2, de los cuales 5006 m2 corresponden al edificio y 3196 m2, a dependencias bajo nivel. La superficie total cubierta del predio es de 37.884 m2.
- La sala -de 38 metros desde el fondo de la platea hasta el telón- tiene capacidad para 2487 personas sentadas, más 700 espectadores de pie. A 28 metros de altura se encuentra una cúpula con obras de Raúl Soldi.
Por Por Federico Prack <br/> De la Redacción de LA NACION
