Cómo se celebran los 500 años de Rafael en tiempos del coronavirus

ROMA.- Resistirá al coronavirus "Raffaello 1520-1483", la madre de todas las muestras para conmemorar los 500 años de la muerte del gran genio del Renacimiento, esperadísimo evento cultural, que en teoría debería abrir sus puertas al público mañana en las Escuderías del Quirinal?

Es la pregunta que flotaba hoy en el ambiente durante la preinauguración que hubo para la prensa e invitados, en la que pudieron contemplarse más de 120 obras del gran artista que saltó en la fama con las maravillas que hizo en Roma, ciudad en la que imprevistamente murió, con tan sólo 37 años, el 6 de abril de 1520.

Más allá del privilegio de poder ver por primera vez, juntos en una sola muestra, una colección de pinturas, dibujos, tapices y cartas de Rafael provenientes de los mejores museos del mundo, la pre-inauguración tuvo lugar en un clima poco feliz. Al margen de que una persona justo tuvo un infarto, algo que causó alarma en el público, alteró el recorrido y bloqueó a algunos grupos, el evento tuvo lugar en medio de la emergencia por el Covid-19. Y justo en momentos en que el gobierno italiano se aprestaba a anunciar el cierre de escuelas y universidades de todo el país hasta el 15 de marzo para frenar el contagio. Algo que aumentó aún más la preocupación que se vive en Italia y la sensación de estar asistiendo al último gran evento público del momento. Ya que si realmente el gobierno decreta el cierre de escuelas y universidades hasta el 15 de marzo, lo más probable es que también cierren los museos y las Escuderías del Quirinal.

"No hay que ser apocalípticos. Estamos enfrentando una situación seria, sería equivocado hacer como si no pasara nada, pero también es equivocado entrar en el pánico", dijo a La Nación Eike Schmidt, director de los Uffizi de Florencia –museo que también organizó esta mega-muestra, para la que prestó 50 obras–, que admitió que de concretarse el cierre de escuelas podría haber cambio de planes.

"Si se cierran las escuelas eventualmente se evaluará un cierre de museos, son hipótesis muy concretas y racionales dentro de los protocolos, pero será temporario", afirmó. Este historiador del arte alemán aseguró que los museos están capacitados como para reaccionar a situaciones extraordinarias como la que vive. Detalló, de hecho, que en los Uffizi ya desde hace años se contempla una presencia contemporánea de 900 personas, que implica 22 metros cuadrados a disposición de cada visitante. "Esto es acorde con las recomendaciones del comité nacional de sanidad que aconseja que se mantenga una distancia de un metro, un metro y medio, entre las personas", indicó Schmidt, que no ocultó su preocupación porque el gobierno italiano ya prohibió las visitas de grupos escolares, lo cual significa una baja importante de visitantes para los Uffizi. "El 2020 evidentemente será el año sin visitas de alumnos de escuelas, pero espero que el año que viene todo vuelva a la normalidad", sostuvo.

Más allá de la situación a todas luces alarmante, preguntado por LA NACION acerca de la mega-muestra, Schmidt destacó su importancia. "Nunca en la historia fue posible admirar tanto capolavori de Rafael exhibidos juntos para conmemorar el quinto centenario de su muerte. Los amantes del arte de todo el mundo no pueden dejarse escapar esta oportunidad excepcional para viajar a Roma y visitar las Escuderías del Quirinal", dijo con optimismo. "Es una oportunidad para sumergirse completamente en el maravilloso universo del arte de Rafael", agregó.

La muestra se destaca por hacer un recorrido cronológicamente al revés. Arranca, en efecto, con la muerte del también llamado "urbinate" –Rafael nació en Urbino, en el centro de Italia– y culmina en su etapa joven. Cuando, luego de haber dejado su ciudad, viajó primero a Siena y Perugia –donde aprendio la leccion pictorica junto al Perugino– y después a Florencia, entonces meca de los artistas. Entonces pintó dos obras fundamentales: la Dama con del unicornio , realizada poco después de haber visto la Gioconda de Leonardo da Vinci y el llamado Sueño del Caballero. Cierra la muestra el famoso autorretrato del genial artista del Renacimiento prestado por la Galería de los Uffizi, símbolo y tarjeta de presentación del gran homenaje a Raffaello.