Las bondades de Edipo, en la palabra de Orhan Pamuk
BARCELONA.- Aunque no deja pasar la oportunidad para defender la UE y manifestarse a favor de la postergada incorporación de su país -ya lo hacía mucho antes del Nobel de Literatura en 2006, cuando no era el escritor turco más leído-, a Orhan Pamuk (Estambul, 1952) no le gusta hablar de política. No quiere preguntas sobre la minoría kurda ni sobre el régimen de Tayyip Erdogan, y así lo hace saber en su visita relámpago a la ciudad, donde brindó una charla en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona, dentro de la programación continua del festival Kosmopolis.
Pero la paradoja es que la política lo persigue desde que mentara el genocidio armenio, se convirtiera en el blanco del nacionalismo turco, y fuera procesado por ello en 2004, hasta consolidarse en los últimos años como el disidente más prestigioso del régimen de Erdogan. Y suerte que no le gusta, porque además la practica en su literatura. Sobre todo, en La mujer de pelo rojo (Literatura Random House), su última novela. "Podemos decir que esta es una novela política, pero a nivel antropológico o en el sentido experimental de jugar con las ideas", dice con desenfado. Las ideas a las que se refiere son el individualismo o, mejor dicho, el ejercicio de las libertades individuales, por un lado y el poder o, ya de plano, el autoritarismo, por el otro. Una dualidad que Pamuk explora, al igual que la dicotomía entre Oriente y Occidente.
Todo comenzó hace 25 años, "cuando intentaba acabar El libro negro", recuerda. "Trabajaba muy cerca de mí un pocero y su joven aprendiz. Yo los observaba cavar cada día y me llamaba la atención su relación paterno-filial de gritos y sometimientos por la mañana y de afable ternura y cuidado por la tarde". Con los "derroteros autoritarios que fue tomando mi país entonces me decidí a contar esa historia", añade, aunque se demoró lo suyo en macerarla. El tiempo en el que dos referencias cruciales y antagónicas de la literatura universal (Edipo Rey de Sófocles y la historia de Rostam y Sohrab, como la recoge el poeta persa Ferdousí en la epopeya Shaname o Libro de los Reyes) le permitieron ajustar su factura, a caballo de la fábula, el relato mitológico y la tragedia contemporánea.
Entre las dos variantes, el mito del parricidio occidental y el filicidio de la tradición persa, Pamuk se decantó por versionar la primera ambientada en las afueras de Estambul a mediados de la década del 80. En La mujer de pelo rojo, el enfrentamiento entre padre e hijo se representa entre el maestro pocero y aprendiz que cavan en un páramo yermo y se dirime a partir de la aparición en escena de la misteriosa mujer del título de la que se enamora el joven. "En la tradición de Oriente Medio allí donde encuentras agua es donde puedes crear civilización, pero si no la encuentras, el pozo es una metáfora de la inutilidad de la acción humana", explica. Y con respecto a la cabellera roja, representa "la furia o la fuerza sin control desde Shakespeare". Pero en Oriente es sinónimo de "saltarse las reglas. En la parte del mundo donde vivo, una mujer que se tiñe de rojo grita su posicionamiento político y de género".
Cómo se gestiona la culpa del asesino involuntario o en una y otra versión del mito es crucial para entender hacia a dónde apunta el Nobel turco. "Cuando el público de la tragedia griega siente tristeza por la suerte de Edipo, que al saberse culpable se arranca los ojos, está disculpando la transgresión de su individualidad", explica. "Pero en la tradición de la literatura persa, cuando nos apenamos por la culpa del padre que mata a su hijo, de alguna manera estamos legitimando al Estado todopoderoso y al autoritarismo", completa.
El mensaje está más que claro y lo curioso del caso La mujer de pelo rojo es que se publicó originalmente en Turquía en 2016, casi en simultáneo con el fallido golpe de Estado de Erdogan. "Las buenas novelas son premonitorias", se excusa Pamuk, "y los novelistas, profetas ingenuos".
Un libro premonitorio
La mujer de pelo rojo
Autor: Orhan Pamuk
Editorial: Literatura Random House
Páginas: 288