Por qué a ellas les va mejor que a ellos en el aula
Para los expertos no se debe a superioridad intelectual
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¿Ellas son más inteligentes que ellos? Las estadísticas reflejan que las mujeres tienen mejor rendimiento en el aula que los varones. Del total de egresados universitarios argentinos de instituciones públicas en 2003, el 60% fueron mujeres. En la escuela secundaria repiten y abandonan en menor proporción que los varones.
Especialistas de distintas áreas, consultados por LA NACION sobre la incidencia del género en el rendimiento educativo, coincidieron en que ningún estudio demostró la superioridad intelectual de las mujeres sobre los hombres o viceversa. En cambio, se admite la existencia de factores culturales cuando se habla de las posibles causas del mejor rendimiento de las mujeres.
Entre otras explicaciones, se destaca que esos resultados podrían estar vinculados con los estereotipos de cada género. Así se subraya que las mujeres son más esforzadas, constantes y ordenadas, cualidades muy valoradas en el sistema educativo, que las llevaría irremediablemente al éxito en el aula.
En las carreras de Bioquímica y Farmacia, el 74,7% de los egresados son mujeres. El porcentaje es del 72,2% en Estadística; 73,5%, en Matemática, y 81,4% en Sociología y en Antropología. Y en carreras como Letras y Psicología superan el 86 por ciento.
"La mujer es muchas veces académicamente más sistemática que el varón, más ordenada y quiere destacarse", consideró María Victoria Gómez de Erice, rectora de la Universidad Nacional de Cuyo. Señaló que hay un predominio de la mujer en todas las carreras universitarias y que "no hay inteligencias sexuales, sino aptitudes individuales".
Por su parte, el secretario académico de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Raúl de los Santos, consideró que si bien toda generalización es arbitraria "debe de haber algún factor común que condiciona socialmente para que las mujeres en la Argentina, así como en España, Inglaterra y Estados Unidos, ocupen las dos terceras partes del ámbito de la medicina".
En la Facultad de Medicina de la UBA, que reúne seis carreras, hay 17.013 mujeres y 6607 hombres. También ellas son mayoría en los posgrados, las maestrías y los doctorados del área. A pesar de las cifras, nunca asumió una decana mujer en esa unidad académica.
Tendencia mundial
En el nivel internacional ya se está investigando el más bajo rendimiento de los varones. "Lo que se encuentra es que muchas creencias culturales que hacen a la virilidad, como desafiar las normas, ponerse en riesgo, la posesión de una inteligencia innata, constituyen un estereotipo que estaría influyendo en el peor rendimiento de los varones", explicó Graciela Morgade, directora general de Educación Superior de la Secretaría de Educación de la ciudad de Buenos Aires.
El estereotipo masculino estaría conformado, así, por valores que la escuela no valora. En cambio, las mujeres estarían educadas para esforzarse, ser voluntariosas, prolijas, tener un buen comportamiento, características ponderadas por la escuela que muchas veces se evalúan con la denominación de "nota de concepto".
"Mi opinión es la de muchos expertos en las ciencias del cerebro y de la mente. Si bien se pueden encontrar algunas diferencias en la organización y el desarrollo del sistema nervioso de varones y mujeres, nada permite afirmar la superioridad intelectual de uno u otro género", dijo a LA NACION el investigador Antonio Battro, quien agregó que el rendimiento escolar "es el resultado de muchas variables".
El informe del Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes (PISA, según sus siglas en inglés) del año 2000, en el que participó la Argentina, mostró como tendencia general que las mujeres son mejores en competencia lectora, mientras que los varones tienen mejor rendimiento en matemática.
"En el caso de la Argentina, no aparecen diferencias tan marcadas como las que señala PISA como tendencia general. Hay una situación de mayor paridad", explicó Margarita Poggi, directora del Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación, de la Unesco.
Al analizar el resultado de las pruebas de comprensión lectora de PISA en la Argentina se percibe una diferencia significativa en favor de las mujeres, mientras que en matemática y en ciencias, a diferencia de la tendencia internacional, ellas también ganan, aunque la diferencia no es relevante.
Poggi señaló, asimismo, que nuestro país tiene buen índice de paridad en el acceso a la escolaridad -similar cantidad de varones y de mujeres-, en contraste con otros países de América latina. Y agregó: "Los estudios marcan la relevancia del contexto social y las trayectorias escolares como factores que permiten explicar la diferencia".
El Instituto Libre de Segunda Enseñanza (ILSE), una escuela secundaria pública de la ciudad de Buenos Aires que tiene examen de ingreso y que hasta 1982 era un colegio sólo de varones, hoy cuenta con 607 mujeres y 437 varones. Sin embargo, la rectora Vilma Saldumbide opinó: "Hay condicionamientos, como la salud psicofísica, el ambiente, el estímulo temprano, el aspecto nutricional, que son variables muy fuertes para que el chico esté capacitado para aprender. Hay que ser cauteloso con el rendimiento atravesado por el género".
Desde una mirada psicoanalítica, Silvia Justo, especialista en niños y adolescencia, docente del Centro Dos, explicó que "la mayor o menor rapidez con la que aprende un ser humano no depende del sexo, sino del efecto del lenguaje, de las palabras con las que fue nombrado ese hijo por sus padres en la infancia". Por ejemplo, si los padres se refirieron a su hijo o hija como inteligentes o lentos, ese enunciado quedará inscripto en el niño, independientemente del sexo.



