Fórmula 1: la histórica pole position de Lance Stroll, el hijo de un multimillonario y estrella del jet-set

Lluvia, mucha lluvia. Banderas rojas, un trazado resbaladizo. Caos en la pista. Fueron las condiciones que aprovechó Racing Point a través de Lance Stroll para conseguir una pole position histórica en el Gran Premio de Turquía de la Fórmula 1. El canadiense, hijo del multimillonario Lawrence (dueño de la escudería), dio la sorpresa y saldrá en el primer lugar de la parrilla por primera vez en su carrera.

En una sesión de clasificación marcada por los distintos vaivenes, Stroll cubrió los 5.340 metros de la lluviosa pista turca en 1:47.765, por delante del holandés Max Verstappen (Red Bull), que registró 1:48.055 y con medio segundo de ventaja sobre su compañero mexicano Sergio Pérez, que arrancará tercero.

Con Mercedes ya consagrado Campeón Mundial de Constructores, este domingo puede darse nada menos que la séptima corona de Lewis Hamilton, marca con la cual el británico igualaría al legendario Michael Schumacher. Aunque de movida, la sonrisa inicial en Estambul quedó para el joven de 22 años que nació en Montreal. "Es uno de los mejores momentos de mi carrera. Soñamos con esto desde que somos pequeños", confesó Stroll.

Tras dos banderas rojas, mucha espera y, sobre todo, mucha emoción, Stroll hizo historia al conseguir la primera posición de salida de su carrera. Con ello, además, su equipo (con motores Mercedes) logró una pole por primera vez desde que su estructura predecesora, Force India, lo lograse con Giancarlo Fisichella en el Gran Premio de Bélgica 2009.

Todo ello en unas últimas vueltas de infarto en Estambul. Pérez, con neumáticos intermedios, destronó en los minutos finales a un Verstappen que había dominado gran parte de la sesión, pero, con el tiempo casi cumplido, su compañero de equipo voló para arrebatarle la posición de privilegio. "Es difícil explicar todo esto con palabras, estoy en shock. Sin dudas que es uno de los grandes momentos de mi carrera", dijo Stroll.

La historia del piloto nacido el 29 de octubre de 1998 cuenta con varias peculiaridades. Lance es el hijo de Lawrence, un multimillonario de 61 años que con una fortuna valuada en 2700 millones de dólares figura en la lista de los 1000 hombres más ricos del planeta, según Forbes. Sus excentricidades y su amor por el vértigo acabaron por conseguir una butaca para su hijo en Williams en 2017.

Lance, en tanto, entró a formar parte en 2010 de la Ferrari Academy, con la mira puesta en integrar algún día la escuadra oficial de F1. Pero Lawrence entendió, a comienzos de 2016, que Ferrari no era el sitio adecuado para su hijo -mucha política, grandes nombres y pocas posibilidades- y entonces cambió de estrategia.

Lawrence Stroll es un mago de los negocios en el campo de la indumentaria: hizo crecer marcas como Tommy Hilfiger o Michael Kors, tuvo a su cargo el marketing de Ralph Lauren en Europa y acabó adquiriendo la joyería Asprey. Nacido en Montreal, a los 15 se inició en el negocio familiar de ropa infantil que tenía su padre Lyner, quien además era poseedor de los derechos de venta en Canadá de vestimenta para mujeres y niños de Pierre Cardin y Polo Ralph Lauren; en la década de los 80, Lawrence comercializaba los productos de Polo Ralph Lauren en Europa.

Los negocios, el jet-set y los autos son las pasiones de Stroll padre, por esa razón es habitual que sea el anfitrión de fiestas a las que asisten amigos famosos como Michael Douglas y Catherine Zeta-Jones, como también los viajes en su yate Faith, de 200 millones de dólares, o los vuelos en aviones o helicópteros que son de su propiedad.

Hace algunos años, Lawrence detectó que la escudería Force India transitaba un momento angustiante. Aportó junto a inversionistas 117 millones de dólares -también se hizo cargo de una deuda de US$ 19.500.000- y se adueñó del equipo. Después de 11 temporadas, en 2019, Force India pasó a llamarse Racing Point.

Asimismo, Racing Point cambiará su nombre por el de Aston Martin en 2021, después de que el propietario del equipo, el propio Lawrence Stroll, invirtiera en el fabricante británico a principios de este año. Movimientos millonarios y nuevos salvatajes para que la escudería pueda retornar al Gran Circo después de 60 años. Las butacas aseguradas para la próxima temporada serán para Vettel y, por supuesto, Lance.

"Esta es una buena manera de recuperarme después de varias semanas complicadas desde Mugello", explicó el joven Stroll, que en tres de las últimas cuatro carreras no había podido finalizar las competencias. Nadie lo podía creer: el piloto de Racing Point puso fin a 14 poles consecutivas de Mercedes, una racha que comenzó en el Gran Premio de Abu Dabi de la temporada pasada.

Un sábado complejo para Mercedes y Ferrari

Mientras, los Mercedes no supieron lidiar con las condiciones reinantes en el trazado turco y partirán, por primera vez en la temporada, fuera de la primera fila de parrilla. El británico Hamilton, que dispondrá este domingo de su primera oportunidad para ganar su séptimo campeonato de la Fórmula 1, partirá sexto, mientras que el finlandés Valtteri Bottas lo hará noveno.

Ferrari, por su parte, tampoco sacó provecho de la clasificación en Turquía. Ambos coches no llegaron a la última tanda de la qualy y exhibieron varias complicaciones. La bandera roja complicó las ilusiones de la escudería de Maranello y Sebastian Vettel partirá desde el 12° lugar. Su compañero de equipo Charles Leclerc saldrá en el puesto 14°.

Vale resaltar que Estambul Park no figuraba en el calendario inicial de la Fórmula en 2020, pero la pandemia del coronavirus obligó a replantear todos los planes. En el nuevo programa, este circuito, que ya fue visitado por la competición reina del automovilismo en siete ocasiones entre 2005 y 2011, fue incluido.

Gran parte de los pilotos de la parrilla actual descubrieron este circuito por primera vez, pero otros ya tenían experiencia en él, con triunfos para Hamilton en 2010, para el alemán Vettel en 2011 y para el finlandés Kimi Raikkonen en 2005. Para este fin de semana, una de las dificultades es la nueva superficie, colocada hace quince días, lo que explica que el asfalto fuera comparado con "una pista de patinaje". Tanto Bottas como Hamilton tuvieron problemas de adherencia. Algo que lógicamente empeoró con el agua en el trazado. "Es un desastre. Los neumáticos no van. Es como en un coche de carretera sobre hielo", había dicho Hamilton tras los primeros ensayos.