El significado del tiempo
Cuando estamos cruzando la meta de cualquier carrera es inevitable mirar hacia arriba en busca del reloj; inmediatamente, también se activa el acto reflejo de detener el cronómetro de nuestro propio reloj. Luego de recuperar el ritmo de respiración, comparamos los dos tiempos y elegimos el mejor. Más tarde, ya recuperados y en charla con amigos o conocidos, seguramente nos preguntarán cuál fue nuestro tiempo, en una pregunta que tiene un significado más profundo que el de conocer un mero dato. En cualquier otro deporte, el score, los goles, los tantos o los triples nos hablan del resultado y la performance de una persona o equipo. En el running son el tiempo y la distancia los que nos dan la pauta de nuestros logros.
Este es uno de los motivos por los cuales siempre queremos saber nuestro tiempo apenas terminamos una carrera, para luego procesarlo y ver si hubo o no progresos. Al respecto, un método para comparar nuestros progresos puede ser:
1) hay que analizar los tiempos. Por ejemplo, tomemos unos 10 km en los que nuestro tiempo total fue de 50 minutos. Esto nos da cierta información, pero no en detalle. Para poder ver los avances o los problemas es mejor tomar los parciales por kilómetro, pues así podemos entender rápidamente en qué parte debemos mantener el paso o cuándo acelerar para llegar al récord buscado.
2) Hay que comparar el tiempo realizado en alguna distancia estándar durante un entrenamiento de rutina y graficar y escribir en el training log el récord personal y en qué zonas o momentos se pierde tiempo que luego repercute en la performance.
3) Siempre es bueno comparar una carrera con otras. Supongamos que en nuestro calendario figura esta semana un 10 km, la siguiente una media maratón y algunas semanas adelante un 8 km. Si podemos evaluar los resultados en diferentes distancias, vamos a determinar cuál va a ser nuestro parcial a paso lento y cuál a paso rápido, y cómo emplear los ritmos en las distancias que correremos.
4) Es fundamental comparar el tiempo en la primera y en la segunda mitad de la carrera, ya que un parcial excesivamente lento en los últimos kilómetros nos indica que en la partida fuimos exageradamente agresivos, con lo cual va a ser muy difícil obtener un tiempo deseado, mientras que emplear un parcial muy lento en los primeros kilómetros nos impedirá mejorar nuestra performance para llegar al tiempo buscado. Por lo tanto, conocer cuál es nuestro paso o parcial de carera es vital.
5) Comparar nuestro tiempo deseado y el actual: si el tiempo utilizado para la carrera está por arriba del tiempo proyectado, esto nos indica que hubo errores en los parciales y en el entrenamiento. Por otro lado, un tiempo por abajo será motivo de celebración, por haber realizado y proyectado correctamente, y nos pone en posición de encarar en el futuro con gran precisión los tiempos que se emplearán.
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