Estonia: una selección débil, un técnico sin experiencia y un arquero que le agradece al Dibu

Parado sobre el Golfo de Finlandia, país al que mira de frente, Estonia -independizado de la Unión Soviética en 1991- conforma el puñado de países que bordean el Mar Báltico, en el norte europeo (con Letonia y Lituania, entre otros). Debilitado futbolísticamente luego de la caída del Muro de Berlín -y su consecuente declaración de República-, el rival que tendrá la Argentina en el amistoso del próximo domingo, a las 15, en Pamplona, es uno de los seleccionados menos competitivos de Europa.

Sin ir tan atrás, en las últimas eliminatorias los números fueron lapidarios: sacó 4 de 24 puntos posibles y perdió 6 de los 8 encuentros del Grupo E, donde apenas le ganó de local a Bielorrusia (el peor de la zona) y rescató un empate 1 a 1 en Cardiff frente a Gales. Anotó 9 goles y recibió 24.

El presente lo encuentra sumido en el último lote de equipos de la Nations League, el certamen creado por la UEFA para darle sentido competitivo a las fechas FIFA. Estonia disputa uno de los dos grupos de la Zona D, junto con Malta y San Marino, por lo que en los papeles no debería tener inconvenientes en terminar primero y ascender un escalón. Hoy, por caso, en el primer episodio de este torneo, venció como local a San Marino por 2 a 0 con goles de Tamm y Kirss.

Su entrenador es suizo: Thomas Haberli, un verdadero desconocido, que como futbolista hizo toda la carrera en su país y tuvo su mejor desarrollo en Young Boys, club en el que también trabajó en sus primeros años post retiro. Aunque su primera experiencia como DT de primera división fue en Lucerna, donde duró menos de un año por los malos resultados, en 2019. A principios de 2021 fue presentado como entrenador del seleccionado de Estonia.

Salvo alguna excepción, no tiene futbolistas en las principales ligas de Europa (ni siquiera figura un club importante en su currículum). El Flora Tallinn, club de la capital, uno de los más populares y ganadores de Estonia, es quien más jugadores aporta al seleccionado. La mayoría de los integrantes del plantel disputa la Meistriliiga, la máxima competición estonia.

Tiene dos arqueros que pelean por la titularidad. Uno está más asentado, Matvei Igonen (25 años), del Podbeskidzie Bielsko-Biała, de Polonia; otro es una promesa: Karl Jakob Hein, que milita en el Arsenal, donde se formó en las juveniles y aún no debutó, ya que delante suyo están nada menos que Aaron Ramsdale y Bernd Leno.

Con 20 años, Hein estuvo a préstamo unos meses en Reading, para disputar el Championship, y cuando firmó su contrato tuvo palabras de elogio para un argentino, Emiliano Martínez. Es que el Dibu -9 años mayor- y Hein compartieron estadía en Arsenal, donde el argentino estuvo varios años hasta tener su oportunidad. Pero las coincidencias no terminan ahí, porque el guardameta del seleccionado albiceleste también tuvo un paso por el Reading, en la temporada 2018/2019. “Emi Martínez estuvo en Reading hace algunas temporadas y hablé con él antes de acordar este préstamo”, dijo Hein en su presentación en el club que milita en el Championship de Inglaterra. Sin dudas, el arquero argentino fue clave para su llegada a los Royals.

Lo mejor del triunfo de Estonia ante San Marino

Suele jugar con línea de tres o cinco defensores, de acuerdo con la peligrosidad del rival. En ese sector mezcla futbolistas experimentados como Sander Puri y Taijo Teniste, ambos de 34 años, compañeros en el Tartu Tammeka, y que promedian 90 partidos internacionales. Con ellos alternan Joonas Tamm, del Flora, un central de gran talla (1,92m), Karol Mets, campeón de la superliga suiza con el F.C. Zurich y el juvenil Maksim Paskotši, 19 años, defensor del Sub 23 de Tottenham Hotspur F. C.

Su estandarte es Konstantin Vassiljev, de 37 añis, el capitán del equipo, multicampeón en su país. Carga sobre su espalda 140 partidos y 25 goles. Lo secunda otro experimentado, Henrik Ojamaa (31), con más de 50 partidos internacionales y una trayectoria en muchas ligas europeas, incluida la segunda división de Inglaterra. Ahora juega en el Flora Tallin. Se conjugan con la juventud de Vladislav Kreida (22), volante central de Skövde AIK, de la Superettan, la segunda división sueca, y de Mattias Käit (23), centrocampista mixto de Rapid Bucarest, uno de los animadores de la liga rumana.

En el ataque, se destaca Erik Sorga, del IFK Goteborg (Suecia) y Robert Kirss, de la liga estonia. Alterna Henri Anier, experimentado de 31 años, que actúa en Muangthong United de la Liga 1 de Tailandia con paso por la liga de Escocia.

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