Viral: el increíble punto que Pablo Cuevas jugó en el torneo de Umag y sorprendió a todos
El uruguayo, con pasado de Top 20, trazó un tiro de fantasía que merece estar entre los mejores de la temporada
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LA NACION
Pablo Cuevas nació en Concordia, Entre Ríos, pero apenas unas horas después viajó a la casa de sus padres, en Salto. El uruguayo, tiempo atrás, formó parte del Top 20. Hoy, a los 37 años, todavía despunta el vicio de la raqueta y sigue haciendo de las suyas. Entre lesiones y resultados que no llegaron, se fue lejos en el ranking: hoy es el 812° del circuito. En su trayectoria ostenta 6 títulos ATP y 4 finales. Tres de esos festejos llegaron en San Pablo, casi un segundo hogar. Otro fue en Umag, en las paradisíacas playas de Croacia.
Allí volvió Cuevas en esta temporada. Como el ranking no le permitía entrar de manera directa, lo hizo como jugador alternativo, una llave extra para ingresar en la etapa de clasificación. Allí le tocó medirse con el austríaco Filip Misolic, de 21 años y 129° del ranking. Cuevas estuvo 5-3 arriba en el primer set. No logró cerrarlo, y a partir de allí, todo fue para su adversario.
Misolic se impuso por 7-5 y 6-2. Pero antes, y aún estando match-point abajo, Cuevas hizo uno de esos pases de magia. Divirtió a los espectadores que había en la cancha. El punto se hizo viral. ¿Como fue? Cuevas tiró un approach sobre la derecha de su rival y subió a buscar la definición. Mirolic, en defensa, intentó un globo que quedó corto. El golpe lógico, con el austríaco desparramado en el fondo del court, era un smash. El uruguayo preparó ese impacto. Pero... todo fue un amago. Sorpresivamente, y mientras apuntaba a la bola en lo alto, bajó el brazo derecho, y pegó entre sus piernas sin mirar a la pelota, que apenas cruzó la red y casi no se levantó. Una fantasía auténtica. Y lo hizo estando con un pie afuera del torneo. Mirolic, del otro lado, no podía creerlo y, segundos después, antes de reiniciar el juego, lo aplaudió.
En todo caso, no es la primera vez que Cuevas tira este truco: ya lo hizo en 2019, en el torneo de Estoril y nada menos que contra Dominic Thiem, por entonces en su mejor momento. El austríaco quiso pasarlo, y el uruguayo ensayó la jugada increíble: amague de smash y toque entre las piernas.
¿Que perdió? No, a esta altura, eso no importa. Misolic ganó luego otro partido, pasó la qualy y jugará en la primera rueda contra otro histórico: el suizo Stan Wawrinka. Cuevas, mientras tanto, regresa al tour de los modestos challengers. En donde sea que juega, siempre hay tiempo de esperar alguna fantasía.
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