$10 millones: el caso de la librería que invirtió apostando a que vuelvan las clases

A tres semanas del inicio del ciclo lectivo que se espera alterne entre la presencialidad y lo virtual, Staples, la empresa argentina de productos de librería e insumos de oficina, invirtió $10 millones en un nuevo local con el foco puesto en la "vuelta a clases".

La compañía, que había frenado su plan de inversión hacia el interior del país por la pandemia, desembarcó en el Dot Baires Shopping de la Ciudad de Buenos Aires y planea abrir más locales en lo que resta del año.

"Esta apertura y las que confiamos seguir abriendo este año, en momentos difíciles para todos con esta nueva normalidad, simbolizan nuestro espíritu de crecimiento en el país, aún en contextos poco amigables", dijo Germán Di Carlo, CEO de Staples Argentina.

La virtualidad escolar y el home office afectaron el corazón del negocio de Staples, que mantiene la estrategia de posicionar su marca con locales físicos. La compañía planea ampliar su inversión a $20 millones para abrir sucursales en Córdoba, Santa Fe y Salta y no descartan la apertura de una sucursal en el AMBA.

"El sector se vio muy golpeado durante el 2020, con meses que tuvieron caídas bruscas en facturación. Nuestra demanda llegó a caer hasta un 50% en los primeros meses y fue recuperando alrededor de un 5 a 7% mensual. Aún estamos alrededor de un 25% abajo, con respecto al mismo mes de año anterior, en volúmenes de productos que eran los más vendidos, como resmas, cuadernos y artículos de escritura", declaró Di Carlo a LA NACION.

El empresario pronostica que en 2021 convivirán las clases presenciales y virtuales, por lo que la temporada de vuelta a clases la prepararon con los productos habituales (cuadernos, mochilas, cartucheras, etc.), y se reforzó el inventario con artículos tecnológicos. El cambio del contexto escolar hizo que el foco de la campaña se haya puesto en la "vuelta a clases" y no la "vuelta al cole" que era el lema clásico de las empresas de insumos durante la temporada de retorno a las aulas.

Mientras que el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, confirmó la vuelta presencial para el 17 de febrero, tanto en el sector privado como en el público, las clases en la provincia de Buenos Aires tienen previsto arrancar en marzo con tandas parciales de alumnos y en combinación con un sistema remoto, aunque todo dependerá de la evolución de la situación sanitaria.

En ese sentido, el empresario dio sus definiciones sobre lo que espera para el sector se reactive: "Con independencia de la estrategia de Gobierno para solucionar el problema macro de la economía, desde las empresas debemos enfocarnos en tomar las medidas micro que hagan más eficientes los procesos internos. Al igual que como pasa en el resto de las industrias que se dedican al consumo masivo, el poder adquisitivo de los salarios y el nivel de desempleo son variables claves para poder comercializar productos de mayor calidad", sostuvo. Sin embargo, Di Carlo luego aclaró que esa variable tardará un par de años en recuperarse.

Desde la empresa señalaron que el cierre de las aulas durante el 2020 y el paso a la virtualidad generaron cambios en los hábitos de consumo de la gente que priorizó la compra de tecnología por sobre los útiles escolares. Los productos más requeridos fueron teclados, auriculares, impresoras, variedades de mouse y mouse pads. En menor medida y dependiendo las posibilidades de cada familia, aumentó su demanda de tablets, monitores y notebooks.