En Chicago, la oleaginosa tuvo un aumento de US$11,9 respecto del jueves y cerró en US$630,06, mientras que el cereal tuvo un alza de US$9,05 y se ajustó en US$320,16
La persistencia de la guerra en Ucrania y problemas climáticos en los principales países productores impulsaron hoy una nueva suba del precio de los granos que, en el caso de la soja y el maíz, llegan a niveles nominales cercanos a los récords de 2012.
En la Bolsa de Chicago, principal mercado mundial de las commodities agrícolas, los futuros de la soja cerraron en US$630,06 dólares por tonelada en la posición mayo con una suba de 11,9 dólares por tonelada, 1,9%, respecto del último día de operaciones. Con esta cotización, la oleaginosa se aproxima a la marca récord de septiembre de 2012, de US$650,7 la tonelada.
El maíz, en tanto, tuvo un ajuste de US$320,16 en la posición mayo, con un incremento de US$9,05 por tonelada frente al jueves pasado, lo que representó un ajuste cercano al mayor valor en casi diez años, de US$326,37, el 21 de agosto de 2012. El trigo cerró en la misma posición en US$411,71 y una suba de 2,1% en comparación con el jueves pasado, es decir 8,82 dólares por tonelada.
En el caso de la soja, según un informe de la corredora Granar, la firmeza de los precios estuvo apuntalada “por las subas del aceite y por la firmeza que experimenta el valor del petróleo, dato este último que resulta un incentivo para un mayor uso de biocombustibles en el corte con los combustibles fósiles, que se encarecieron desde el inicio de la guerra en Ucrania y por las sanciones impuestas a Rusia”.
En el caso del maíz, el analista Eugenio Irazuegui, de la corredora Zeni, explicó que la primera etapa de la siembra del cereal se está desarrollando “con escasos progresos al momento”.
Además, en Brasil, según la corredora Granar, “los pronósticos de lluvias inferiores a las necesarias durante las próximas semanas sobre el centro y el norte atentan contra las buenas perspectivas que traía la segunda cosecha de maíz, de la que depende más del 75% de la oferta total del grano grueso brasileño”. Por otra parte, la continuidad de la guerra en Ucrania amenaza la siembra del cereal en este país, uno de los mayores productores del cultivo a nivel mundial.
El conflicto armado también afecta las cotizaciones del trigo ya que Ucrania y Rusia tienen el 30% del comercio a nivel mundial del cultivo. En cuanto a los factores climáticos, Irazuegui explica que en los EE.UU. “para los próximos siete días se aguardan condiciones mayormente secas en las planicies trigueras, condicionando la evolución de los cultivos de invierno”.