La Argentina recibirá una misión de México para avanzar en un acuerdo de exportación de carne vacuna

A fines de febrero de 2021, tras haber pasado tres días en México, el presidente Alberto Fernández regresó al país con la noticia de la apertura de ese mercado para la carne. Un destino que la Argentina históricamente quiso abrir por sus exigencias en materia sanitaria.

Sin embargo, a más de un año del anuncio, todavía ningún corte vacuno argentino llegó a ese mercado. Aún continúan las negociaciones. Según pudo saber este medio, autoridades sanitarias de dicho país viajarán a la Argentina para una inspección integral del sistema sanitario local y también para fiscalizar plantas frigoríficas.

En diálogo con LA NACION, desde el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) indicaron que el arribo de las autoridades mexicanas, pertenecientes al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) está programado para el 18 del actual.

Según detallaron, visitarán 28 frigoríficos y establecimientos ganaderos. También verán cómo se trabaja en los puestos de control, recorrerán las oficinas regionales del Senasa, el Laboratorio de Martínez, el Aeropuerto Internacional de Ezeiza. En total van a visitar 10 provincias.

En el organismo sanitario esperan que la auditoria “permita avanzar después con la apertura del mercado”. Esto mientras continúa el armando del “procedimiento de evaluación de riesgo que está elaborando México”.

Según precisaron, para la visita se constituyeron cuatro equipos. Uno irá al banco de antígenos que tiene el país y el laboratorio oficial para ver las tareas que se realizan en lo que se refiere al control de la vacuna antiaftosa. Otro grupo trabajará a nivel campo, en establecimientos rurales, para analizar las funciones que se llevan a cabo en la lucha contra la fiebre aftosa, y también asistirán a las oficinas locales del Senasa.

El tercero recorrerá los controles fronterizos con Uruguay, Brasil, Paraguay y Bolivia. Y un cuarto grupo estará abocado a los frigoríficos que han solicitado ser habilitados para México “trabajando en el ámbito de la inocuidad y de la sanidad animal”.

De cara a la auditoria mexicana, que significa un paso más para que finalmente se abran las puertas del mercado a la carne argentina, en el sector aseguraron que “las expectativas son las mejores”.

“Para nosotros es muy importante. Tenemos mucha expectativa porque desde hace mucho tiempo que la Argentina está trabajando en la apertura del mercado de México para poder exportar carnes a ese destino”, indicó Mario Ravetino, presidente del Consorcio de Exportadores de Carnes ABC.

“Será una inspección integral para ver el sistema sanitario argentino y también para fiscalizar plantas”, dijo y agregó: “Estamos preparando esa auditoría y esperemos que tengamos buenos resultados para poder oficializar la apertura del mercado”.

Otra fuente del sector remarcó: “Van a ser días intensos en los que 18 inspectores van a visitar frigoríficos, las oficinas locales, el laboratorio, puntos de fronteras”. Destacó que es un mercado al que la Argentina busca ingresar. “México tiene la particularidad que llevamos muchos años queriendo negociar”, dijo. Contó que el Senasa hizo una capacitación específicamente preparando la visita de las autoridades mexicanas.

El consultor ganadero Víctor Tonelli explicó que la Argentina posee como ventaja que tiene habilitada la comercialización con Canadá y Estados Unidos. “Como México está dentro del acuerdo [entre esos países], la normativa y las exigencias son bastante similares a las que imponen Canadá y Estados Unidos, dos países con los que la Argentina ya tiene abierto el mercado, por eso entiendo que debería ser una auditaría con grandes posibilidades de éxito”.

“México [importa más de 130.000 toneladas mientras exporta unas 380.000] tuvo que hacer un gran esfuerzo para poder adecuar su sistema de inocuidad y seguridad alimentaria al modelo canadiense y estadounidense, por eso exige un sistema similar”, dijo.

Vale recordar que, cuando se hizo el acuerdo bilateral, el gobierno mexicano expresó que ambos países habían acordado que la apertura se iba a dar “en los mismos términos de salud e inocuidad” que Uruguay.