En el dictamen de la Comisión de Presupuesto y Hacienda para el presupuesto 2019 se introdujeron cambios en algunos puntos que preocupaban al sector
En la versión inicial del proyecto, en el artículo 83 se le daba al Gobierno la potestad para que las retenciones pudieran tener un tope del 33% sin discriminar productos.
Hace unos diez días, el Ministerio de Hacienda confirmó que ese tope solo regiría para la soja, mientras que para el resto de los productos (trigo, maíz, carne, entre otros) el máximo no superaría el 12%.
Según contó una fuente legislativa consultada por LA NACION, finalmente el tope para la soja será del 30%, tres puntos menos respecto del proyecto original.
En septiembre pasado, la soja quedó con una tasa fija de retenciones del 18%. A ese nivel hay que sumar el nuevo esquema de $4 por dólar exportado. Como máximo, en función del valor del dólar, la alícuota adicional no puede superar un 12%.
"El 30% es para salvaguardar lo que ya está vigente; el 18% fijo más ese 12%", indicó un diputado del oficialismo.
Con un dólar en torno de los $37/37,50, la retención móvil hoy se ubica en 10,81%. Si el dólar se acercara a los $34, el piso de la banda que quiere el Gobierno (de $34 a 44 pesos), en ese caso la retención extra sería del 11,76%, según un informe de la consultora Barrero & Larroudé. En tanto, sería del 12% con un dólar de 33 pesos.
La fuente consultada negó que pueda existir un incremento más allá de lo vigente con el actual sistema de retenciones para la soja, es decir, con la parte fija y la móvil.
En cuanto a Bienes Personales, donde el sector rechaza cualquier incremento de la carga impositiva para los inmuebles rurales, según la fuente consultada "habrá modificaciones de acá a la sesión (de mañana, a las 11)". De hecho, trascendió que Cambiemos propondrá en el recinto mantener una exención.
Sobre este tema, hoy Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) volvió a emitir un duro comunicado, que tituló "Matando a la producción".
"Si se incrementan los impuestos en base a las urgencias de las necesidades de financiamiento sin tomar en cuenta cómo es el mecanismo de agregado de valor del sector agropecuario, lo único que se genera es un incentivo a la pauperización de la producción, la alta carga impositiva reduce beneficios y deja menor capital para reinversión productiva. La respuesta es casi de manual y la vivimos en el gobierno anterior, producir a bajo costo, sin incorporación de tecnología, menos producción para el agricultor, para la provincia y para el país", apuntó CRA.
Por otra parte, en el Congreso se dispuso reforzar con $400 millones el presupuesto del INTA. Como informó LA NACION, en el organismo había preocupación por el funcionamiento de varios laboratorios en 2019.
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