Stands con una mayor inversión y cabañeros con viento de cola

En el pabellón de maquinaria agrícola, ayer varios expositores hacían cuentas. Respecto del año pasado, los presupuestos para gastar en exponer maquinaria subieron entre un 15 y un 20%. Así, considerando la inversión total -esto es, el traslado de equipos desde el interior, estadía en Buenos Aires y la arquitectura misma de los stands-, en la Rural hay stands de maquinaria que tienen un gasto de 2 a 10 millones de pesos, considerando todos estos conceptos.

"Vemos una exposición superadora en máquinas. Nosotros estamos con un 50% más de metros que el año pasado", contó a LA NACION Fernando Otalora, gerente de marketing táctico de John Deere.

En la firma están entusiasmados porque, dicen, la industria de tractores está creciendo un 50%, considerando los destinados a agricultura y a ganadería. Respecto de este último rubro, en Palermo la empresa está lanzando un tractor de 82 caballos, sin embrague, para facilitar las tareas en establecimientos pecuarios. En la muestra va a presentar un acuerdo con la Cámara de Feedlot con beneficios para la compra de mixers de su marca GreenSystem, entre otros productos.

"Hay buenas expectativas y por eso acá se invierte más en stands", precisó Juan Pablo Rodríguez, de Metalfor. Esta firma vino con una pulverizadora autopropulsada que tiene orugas traseras, lo que facilita, por ejemplo, el tránsito en terrenos con mucha humedad.

Entre las razas vacunas, se observa un fuerte crecimiento de Brangus. Tiene 118 animales, contra 79 del año pasado. Además, el número de cabañas de esta raza subió de 36 a 48. Ayer, Laura Pezzi, de la cabaña Los Ceibos, de Tandil, que hace Hereford y Angus, remarcaba que las perspectivas para las cabañas ganaderas son buenas. Lo argumentaba con los precios que ya están teniendo los toros en los remates que se están haciendo. "Están un 7% arriba del año pasado, con toros en 50.000 pesos promedio para el servicio de vaquillonas", afirmó.

Pezzi marcó contrastes entre el gobierno anterior y el actual. "Con el anterior costaba llevar adelante la cabaña. Con el actual hay más facilidades para créditos. Sacamos uno del Santander Río para un mixer y otro del Nación para retención de vientres", dijo. Jorge Sedelli, gerente de la cabaña La Paz, de Werthein, coincidió con los buenos precios para los remates. "Los remates de otoño vienen mejor de lo esperado. Nosotros -en una reciente subasta- tuvimos un 30 a 35% más que el año pasado", indicó.

Destacó que el mercado de reproductores "se va a ir afirmando más" en la medida que mejoren las contingencias climáticas. Por nuevas tecnologías, como la transferencia embrionaria, que facilita el acceso a buena genética para las cabañas, subrayó que aquí "el 50% de las cabañas son modernas, de menos de 10 años".