“Hay compañías irlandesas que quieren instalarse en la Argentina”

Al finalizar la visita a la Argentina del ministro de Estado para la Promoción del Comercio, Regulación Digital y Empresarial de Irlanda, Dara Calleary, se produjo la sorpresiva renuncia del primer ministro irlandés, Leo Varadkar. Ante la pregunta de LA NACIÓN ayer sobre este tema, desde la embajada irlandesa en la Argentina contestaron “el ministro está en un avión y nosotros no podemos comentar en su nombre”. Antes de conocerse este torbellino político el ministro dejó algunas definiciones sobre las relaciones bilaterales entre ambos países.

Una de sus primeras acciones en este país fue conocer la tumba del Almirante Guillermo Brown, en el cementerio de la Recoleta. El marino irlandés nació en Foxford, en 1777. Radicado en estas tierras, cuando murió, en 1857, se lo honró “como símbolo de las glorias navales de la República Argentina y cuya vida ha estado consagrada constantemente al servicio público en las guerras nacionales que han sostenido nuestra Patria desde la época de la Independencia”.

Según registra el Indec, en 2023 el comercio con Irlanda fue de US$895 millones y dejó un saldo positivo para la Argentina de casi US$78 millones. La balanza comercial se inclina a la Argentina desde 2002. Se exportan alimentos para animales, vino y aceites de limón, y se importan sobre todo, productos de la industria farmacéutica. La Argentina es el tercer socio comercial de Irlanda en la región, después de México y Brasil

Por otro lado, Irlanda es muy competitiva en la exportación de servicios y aquí tuvo una balanza favorable en más de US$200 millones en 2021. La mayores compañías irlandesas en la Argentina son Smurfit-Kappa (papel) y ICON (clínica). Guinness opera bajo la firma Rabietta en una planta en Pilar y Pernod-Ricard importa el Jameson Irish whiskey, un producto que compite con el escocés, pero que Calleary afirma que es “mejor el irlandés”. También hace hincapié en que hoy, después del Brexit, Irlanda es el único país de habla inglesa de la Unión Europea

- ¿Qué lo trajo a la Argentina?

- Bueno, antes de todo quiero hacer referencia a que estamos sobre el fin de la conmemoración de San Patricio. Es tradición que los ministros viajen por el mundo a unirse a la celebración de 17 millones de personas. Luego, soy ministro de Transformación Digital en Irlanda, entonces quería conocer la situación en este país. Pero además, yo represento al Condado de Mayo, en Irlanda, en el Parlamento. Es allí donde nació el Almirante Brown, que es el padre de la Armada en la Argentina. El nombre todavía es muy reconocido en el condado. Pude visitar su tumba la Recoleta.

- ¿Qué relación tienen ambos países?

- Tenemos mucho común. En primer lugar, aquí hay medio millón de argentinos que tienen sangre irlandesa. Es el grupo más grande de habla no inglesa en el mundo. Irlanda abrió su embajada en Buenos Aires en 1947. Estábamos recién empezando como República. Teníamos una presencia internacional muy limitada, pero decidimos que la Argentina iba a ser de los primeros lugares en donde íbamos a estar. La Argentina abrió su embajada en Dublín en el 1964, por lo tanto las relaciones entre ambos países es muy fuerte.

- Irlanda es una economía muy avanzada en digitalización, ¿compartió experiencias en la Argentina?

- Somos la quinta economía más avanzada en términos digitales. Me reuní con el jefe de Gobierno porteño, entre otros funcionarios, en el Parque de la Innovación, y compartimos nuestras experiencias en términos de capacitaciones, inversión en tecnología digital y servicios públicos digitales. Participé allí en el lanzamiento de un proyecto financiado por la Unión Europea para asistir a diferentes comunidades en la digitalización .

- También tienen mucha experiencia en la exportación de servicios

- Aquí la Argentina tiene una gran oportunidad de crecimiento. Estamos trabajando con el equipo de la embajada local y también con la embajada argentina en Dublín para seguir reforzando las relaciones. Nosotros invertimos mucho en el desarrollo de capacidades de la fuerza laboral. Nos aseguramos de que las habilidades que tienen los trabajadores estén alineadas con lo que se necesitan hoy. Así pudimos aumentar la cadena de valor de las exportaciones de servicios de alto nivel.

- ¿Podría brindar algún detalle en este sentido?

- Sí, por ejemplo, creamos un grupo dedicado a estudiar las habilidades necesarias para desarrollar la inteligencia artificial. Hace dos años se hablaba mucho del tema, pero nosotros pedimos un informe a las universidades irlandesas sobre el desarrollo de estas capacidades.. Ahora Irlanda está ofreciendo casi 100 cursos sobre inteligencia artificial. Esa es nuestra puerta de entrada también para el desarrollo de la IA.

- ¿Qué compañías irlandesas trabajan en la Argentina?

- El Parque de la Innovación está al lado del estadio de River. Allí, una compañía irlandesa es la que hizo el nuevo campo de juego. Luego, hay 60 empresas que están en Irlanda que exportan a la Argentina en muchos sectores, especialmente en servicios. Un sector muy fuerte son los servicios de educación. Hay muchos alumnos del secundario en la Argentina que van a Irlanda para estudiar inglés y la cultura del país. Se quedan con familias irlandesas . Eso es muy importante para nosotros, porque estamos separados por un océano y a una gran distancia, pero hay una relación muy fuerte entre Irlanda y la Argentina. También tenemos las becas Cecilia Grierson, que honran la memoria de esta médica pionera en la Argentina, de ascendencia irlandesa. Es para que jóvenes profesionales realicen estudios de maestría en STEM en Irlanda. Por otra parte, estamos recibiendo solicitudes de empresas irlandesas que están interesadas en entrar al mercado argentino. Y también hay una red de negocios argentinos operando en Irlanda.

- Qué opina sobre la Argentina y sus problemas económicos, entre otros?

- Estuve reuniéndome con muchos grupos en los últimos días y me sorprendió la pasión que tienen por su país. Es una sociedad muy resiliente. Hace 14 años nosotros también tuvimos un serio problema económico. Llevó un enorme sacrificio volver a ponernos de pie. Así que entendemos cuál es la presión que está teniendo el gobierno en este momento. Hay un muy buen potencial para la innovación. Creo que si siguen con este espíritu el país va a estar bien.

- ¿Cuánto tiempo le llevó a Irlanda salir de la crisis?

- Empezamos a tener crecimiento de nuevo en el 2014 y 2015. Luego el 2020 fue un año malo por el Covid, pero decidimos apoyar a las empresas para que, una vez normalizadas, pudieran seguir con sus empleados y eso resultó muy bien. La gente no perdió el trabajo. Además tenemos un sector de la salud muy progresista. Muchas de las vacunas vinieron de Irlanda. Aumentaron las exportaciones en el sector. y somos una de las economías de mayor avance de digital en Europa.

- ¿Qué consecuencias tiene para el país la invasión rusa a Ucrania?

- La invasión ilegal a Ucrania afecta a las empresas y a los ciudadanos. Aumentaron los índices de inflación y las tasas de interés. Ahora la inflación está bajando rápidamente y estamos esperando la decisión del Banco Central Europeo para reducir las tasas de interés, y así darles a los ciudadanos la oportunidad de tener mayor capacidad de gasto.

- ¿Cuál es su opinión sobre el postergado acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea?

- En mi país nosotros siempre estuvimos abiertos al comercio mundial, pero hay que tener normas comerciales. En este momento estamos en un camino muy importante para ir hacia la sustentabilidad y el control de las emisiones de carbono. Estamos esperando la publicación final de un trabajo técnico sobre el tema para tomar la decisión. Hay estándares que cumplir para 2030 y hay que llegar a ser una sociedad neutral en carbono para 2050. Estamos ansiosos y deseosos de que se llegue a un acuerdo sobre bases estables, sustentables y consistentes.

- ¿Qué otro tema considera importante en la relación entre ambos países?

- El rugby. El equipo argentino vendrá a Irlanda, liderado por Felipe Contempomi, que jugó y estudió en Irlanda.

- ¿Compiten con el whisky escocés?

- ¡Sí! Pero somos mejores.