Crece la recaudación impositiva por efecto cuarentena, mayor presión fiscal y precios externos

Impulsada por la mayor presión fiscal que se produjo desde el inicio del actual gobierno, la mejora de los precios internacionales y el impacto estadístico de una base de comparación contra un mes en el que la cuarentena golpeó con mucha fuerza, la recaudación impositiva avanzó 104,7% interanual, lo que significa un alza real de 40%.

Según informó el Ministerio de Economía, la recaudación fue de $817.882 millones el mes pasado. Si bien se trata de una buena noticia para las arcas nacionales, el incremento se encuentra principalmente explicado por la reducida base de comparación de abril de 2020, mes atravesado por la plena implementación del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO).

Nadin Argañaraz, director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), señala que al analizar la recaudación del mes de abril de este año debe considerarse que los principales impuestos, es decir IVA, Ganancias, débito y créditos bancarios, y Aportes y contribuciones a la seguridad social tuvieron mínima recaudación en abril de 2020, dada la pandemia. “De los principales impuestos, la mejor dinámica la tuvo IVA neto, con una suba real de 37,9%, seguido por Ganancias, con un 36,2%, y Cheque, con un 33,3%. Los aportes y contribuciones tuvieron una suba real por primera vez desde 36 meses, creciendo un 15,2% en moneda constante”, detalla el economista.

Fuentes del Ministerio de Economía destacan, asimismo, que el conjunto de conceptos que responden a la actividad económica registró un incremento superior al 2,0% real comparado contra el mismo mes de 2019. “En este grupo cabe resaltar lo ocurrido con el IVA (97,7% i.a) y el impuesto a las ganancias (98,7% i.a.)”, subrayan.

El de abril es el octavo mes consecutivo de suba real de la recaudación de impuestos, lo que es muestra de una mejora lenta y heterogénea de la actividad, que va de la mano de los avances que se observan en el Estimador Mensual de la Actividad Económica tras las flexibilizaciones. A eso se suman la fuerte suba de la presión fiscal sobre los privados y la mejora de los precios internacionales de las commodities.

“Abril es el octavo mes consecutivo de crecimiento por encima de los aumentos de precios, con una variación del 40% en términos reales. Es cierto que se compara con un período critico del año pasado pero también se observa con fuerza el efecto de la heterogénea recuperación”, dijo la directora de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont, durante una entrevista con Radio Nacional.

Juan Ignacio Paolicchi, economista de Empiria Consultores, dice que debería hacerse una comparación con abril de 2019, ya que respecto de 2020 siempre iba a dar una suba impresionante porque la base de comparación es bajísima. “La comparación que vemos hoy está 7% por debajo de abril de 2019. Obviamente que la recaudación en los próximos meses va a tener aumentos extraordinarios por esta baja base de comparación, pero cuando hagamos el desagregado lo que veremos son aumentos por el lado de los derechos de exportación”, explica.

En efecto, los derechos de exportación aportaron $79.771 millones a la recaudación, lo que implica un crecimiento de 183,2% respecto de igual mes de 2020 y 12% más si se lo compara con marzo de este año. En este caso nuevamente impactaron allí la devaluación y la mejora de los precios internacionales de las commodities.

El resto de los tributos, con menor participación en la recaudación total, crecieron en general por encima del 40% real. “Las tarifas a la importación resultaron un 53% real más elevadas que las del cuarto mes del año pasado. Los impuestos a los combustibles por su parte crecieron un 59% real por encima de lo que se recaudó de combustibles en el peor mes de la pandemia del año pasado. Bienes Personales y los Internos coparticipados tuvieron crecimientos reales por encima del 150% y 220%, respectivamente”, detalla Argañaraz.

El economista Gabriel Caamaño, de Consultora Ledesma, dice que comparada con abril de 2019, que es a su entender contra lo que realmente se debe cotejar, la recaudación creció 7%, pero aclara: “Si en el cálculo no se toman en cuenta los nuevos impuestos (PAIS y Aporte extraordinario) y las modificaciones introducidas en Bienes Personales, la recaudación tributaria nacional está en términos reales aún levemente por debajo de abril 2019 (-2%)”.

Según Caamaño, con un cambio en la composición más que significativo -porque en términos reales contra dicho mes de 2019 caen Ganancias, IVA DGI y Seguridad Social, entre otros, al tiempo que suben fuerte IVA DGA (aduana, nuevas percepciones), derechos de exportación (precios externos, mayor tipo de cambio real y mayores alícuotas) y derechos importación-, queda caro que si bien versus el piso del ASPO el alza real se explica por la esperable recuperación de la actividad, contra 2019 no ocurre lo mismo. “En este caso, los mayores recursos tributarios en términos reales son resultado de los mayores precios externos, el mayor tipo de cambio real y la mayor presión tributaria”, concluye el economista.

Con vistas a lo que está por venir, Matías Rajnerman, economista jefe de la Consultora Ecolatina, comenta que todo dependerá de lo que pase con la cuarentena. “Si se endurecen las restricciones, esta mejora de la recaudación va a empezar a languidecer; por el contrario, si se acelera la vacunación o bajan los casos, lo más probable es que la recuperación siga, aun cuando las bases de comparación vayan a ser menos anormales de lo que fueron en abril”, indica.