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Deja Edenor su principal socio: Electricité de France
Contrató al JP Morgan para vender su parte; desde 2002 tiene pérdidas por $ 354,5 millones
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Electricité de France (EDF) oficializó ayer la puesta en venta de Edenor, la distribuidora de electricidad de la zona norte de la Capital Federal y el conurbano. La noticia sorprendió al mercado local y especialmente a los 2400 empleados directos que tiene la compañía en el país, aunque los rumores sobre la salida de EDF de sus operaciones en América latina arreciaron durante el último año.
La noticia se conoció mediante un comunicado que EDF envió a la Bolsa en el que señala que contrató los servicios del banco de inversión JP Morgan para analizar "alternativas estratégicas con respecto a su inversión en Edenor". La división EDF Internacional comunicó además que, a esos efectos, ha iniciado conversaciones preliminares "con terceros interesados, con carácter no exclusivo ni vinculante".
La venta de la filial local forma parte de una retirada generalizada de Electricité de France de mercados emergentes. En 2002, EDF puso en marcha un plan de expansión internacional que incluyó a países de Europa del Este, Africa, Asia y formaron una estructura propia en América latina. Esta estructura dejó de existir hace un mes, debido a que EDF, propiedad del Estado francés, inició un proceso de apertura a la Bolsa y decidió concentrarse en Europa y China.
Además, en el mercado local, Edenor está en medio de una difícil negociación con el Gobierno por un ajuste en las tarifas, que fueron pesificadas en 2001.
Los interesados locales
Según fuentes del mercado financiero, hay varios fondos de inversión interesados en comprar la participación de los franceses: Marathon, Ashmore, Southern Cross, Pegasus, CoinVest y Dolphin.
Este último es comandado por el ex IRSA Marcelo Mindlin, el único que públicamente ha manifestado su intención de participar en la puja por la distribuidora. Fuentes cercanas a las negociaciones dijeron a LA NACION que Mindlin ofreció -en caso de ganar- la presidencia de la nueva compañía a Alejandro Macfarlane, ex director de Repsol YPF.
Un analista del mercado dijo a LA NACION que luego de la devaluación "es muy difícil saber cuánto vale Edenor. La empresa sufrió una gran pérdida de valor por la pesificación de las tarifas y el peso de su deuda en dólares". Edenor debe 512 millones de dólares, casi la misma magnitud de su patrimonio neto, que llega a los 1500 millones de pesos. Durante la crisis siguió pagando los intereses de la deuda, pero no el capital. "Al ser un monopolio, el negocio depende de la variación de la demanda y de las relaciones que pueda establecer con el Gobierno", precisó.
Edenor es una de las privatizadas que todavía no renegoció su contrato con el Gobierno, luego de la ley de emergencia económica que congeló las tarifas. Junto con Edesur participó de la audiencia pública por las tarifas que se realizó la semana pasada, en la que ambas distribuidoras rechazaron la propuesta oficial de ajustes del 15% sólo a los clientes industriales, a cambio de retirar su demanda ante el Ciadi. Fuentes del mercado dijeron que "si la empresa queda en manos argentinas, seguramente la negociación con el Gobierno será mejor".
El fondo Dolphin ya se posicionó en el sector: posee un 50% de Transener, la principal transportista de electricidad, en la que es socio de Petrobras, luego de que ésta compró todo el negocio energético de Perez Companc.
Si bien Petrobras se comprometió a vender su participación en Transener (debido a una cláusula impuesta por la Comisión de Defensa de la Competencia), todavía no lo ha efectuado. Por ley, un mismo accionista no puede ser dueño de una distribuidora y tener más del 50% de una transportista, por lo que, en caso de acordar la compra de Edenor, el fondo Dolphin no podría hacer efectiva la opción a comprar el resto de Transener.
En la Argentina, EDF posee, además de Edenor, la hidroeléctrica Los Nihuiles y la transportista Distrocuyo. La distribuidora Edemsa, en la provincia de Mendoza, fue vendida a un grupo local hace pocos meses. El retiro de EDF de la región hace especular con la puesta en venta de esos activos.
Por Por Josefina Giglio <br/> De la Redacción de LA NACION
