Destinan una suma millonaria para producción audiovisual con fuerte orientación política

De la mano del Ministerio de Cultura y de la Secretaría de Medios y Comunicación Pública, el Gobierno contrató a personas y empresas para producir 79 contenidos audiovisuales entre series, documentales, miniseries y dibujitos animados. Ya se realizaron la mayoría de los desembolsos para los autores de las obras, que se presentaron a un concurso llamado “Renacer”.

El gasto total será de $2.400 millones, una inversión calificada como “histórica” por el Ministerio de Cultura.

Algunos de los títulos que serán producidos para el Estado -ya que será propietario único de las obras tras su finalización- serán: “Piquete, ¿y qué? 20 años de protesta social”; “Camionerxs”; “Sin filtro, educación sexual para adultxs”, “Obreres animades”, un dibujito para niños, “Maternidark”, “Teta y Metralleta”, “Las manos de Perón” y una serie documental sobre el cantante L-Gante, de acuerdo con dictamen oficial de ganadores.

Para este último proyecto fue contratada la firma Kuarzo S.A. El jurado había determinado que serían necesarios $18.553.053,50 para la obra, pero la contratación fue dejada sin efecto en diciembre del año pasado. Quince días después, la empresa recibió el dinero para otra obra ganadora del concurso, por el triple del monto original: $66.563.366,63 (IVA incluido) para una serie llamada “El retiro”, aunque solo les alcanzará para el 50% de la producción. Los datos se desprenden del portal de compras del Estado.

Los que recibirán financiamiento fueron seleccionados a partir de 600 ideas de obras resumidas en tres páginas, en cinco categorías distintas: documental unitario, serie documental, serie de ficción, serie de ficción histórica y serie de animación. Cada una tuvo un jurado conformado y contratado especialmente para la materia.

Las obras serán propiedad del Estado, pero los autores contarán con una licencia de un año para comercializar su producción en el exterior y dos años para hacerlo en el ámbito de la Argentina. Sin embargo, el 50% de los ingresos que generen irán a las arcas públicas, de acuerdo con el pliego que fue entregado a los participantes.

Ya se hicieron 88 desembolsos desde el Ministerio de Cultura en formato de “contrato por exclusividad”, aunque en múltiples casos se confirmaron los proyectos de suplentes o suplentes segundos para las categorías. En el último mes, recibieron el dinero cuatro destinatarios. La Universidad de San Luis fue contratada por $25.097.073,33 para una serie animada infantil de 10 capítulos, de 13 minutos aproximadamente cada uno, que se realizarán en 3D. Lleva el nombre de “Ciencia Intergaláctica”. Patagonia Multimedia S.A. recibió $66.000.000 para la serie ficción “Salma- La última esperanza”. LSV producciones contará con $33.218.283,43 para la serie “DT- La misión” y Aleph Media $33.300.000 para “Mama Frida”, según el portal de compras oficial. Los cuatro fueron proyectos suplentes.

“Si bien la temática es libre y amplia, se ponderará la realización de contenidos vinculados con las infancias, con los consumos problemáticos, la historia y la cultura Argentina, las Malvinas Argentinas y problemáticas actuales vinculadas a las cuestiones de género y diversidad”, detalló el pliego de convocatoria.

Los ganadores son responsables de toda la producción y edición de contenidos, pero cada proyecto tendrá un “productor delegado” de Contenidos Púbicos Sociedad del Estado. Este tendrá intervención en carácter de asesor técnico y artístico para “garantizar el cumplimiento de las condiciones”. “Los ganadores considerarán de buena fe los aportes efectuados por el productor delegado, quien tendrá amplias facultades, y acogerán sus sugerencias con respecto al contenido”, fue informado a los titulares de proyectos.

“Mamá corazón”

La relación del kirchnerismo con la producción cinematográfica fue objeto de polémica en el pasado. En 2018, la Justicia inhibió a la actriz Andrea Del Boca y al exministro de Planificación, Julio de Vido, por la presunta malversación de fondos en torno a las producciones televisivas que se realizaban, total o parcialmente, con fondos provenientes del Estado.

La actriz fue procesada y embargada en cincuenta millones de pesos, con inhibición de bienes por la tira “Mamá Corazón”, una serie de 26 episodios cuya realización implicaba a la cartera de De Vido, al Bacua (Banco Audiovisual de Contenidos Universales Argentino), a la Universidad de San Martín (institución que canalizaba la gestión) y a la productora A+A Group S.R.L. (propiedad de la actriz y con un porcentaje de participación de su madre).

Hubo otros ocho acusados por irregularidades en convenios firmados con la Universidad de San Martín por $344 millones, reenviados a productoras privadas para filmar una novela y una miniserie.