Dólar. Por las restricciones, Pampa Energía aplazó un pago de su deuda

La empresa Pampa Energía, la compañía integrada privada que participa en las cadenas de valor de electricidad y gas que creó Marcelo Mindlin, anunció hoy al mercado que no podrá cumplir en tiempo y forma con lo anunciado una semana atrás en el aviso de pago y deberá tomarse el "período de gracia" de 30 días para abonarlo.

Se trata de US$18,4 millones de intereses comprometidos de la octava cuota de intereses en la Serie T de su programa de Obligaciones Negociables (ON) emitida en 2016.

En el comunicado girado al mercado se preocupó por aclarar que la postergación "no implica un evento de incumplimiento bajo los términos y condiciones" en que fueron emitidos esos papeles de deuda y que se cumplirá con dicha obligación "dentro del período de gracia de 30 (treinta) días previsto en los términos y condiciones del Contrato de Fideicomiso" que regula estos bonos.

La nota girada a la Bolsa detalla que se vio imposibilitada de realizarlo por las "recientes modificaciones en el régimen cambiario que implicaron la extensión del plazo de limitación para acceso al mercado ("MULC") de 30 a 90 días anteriores y de 30 a 90 días posteriores a cualquier operación de transferencia de títulos valores a entidades depositarias del exterior".

Aludió así a las normas que desde fin de mayo puso en vigencia el Banco Central (BCRA) para limitar la demanda corporativa de dólares y tratar de achicar la brecha cambiaria.

Penalidades

Pampa Energía debía cumplir hoy con el pago de ese cupón por el monto citado, pero no pudo adquirir las divisas en la plaza oficial dado que había operado divisas mediante la compra/venta de activos financieros meses atrás, cuando el bloqueo era de apenas un mes. Pero ese plazo se cumplirá "en los primeros días de agosto", por lo que esperan que se cumpla esa fecha para poder adquirirlos, confiaron desde la compañía antes de enfatizar que el pago "se va a realizar".

Hay que recordar que cambios regulatorios de hace 45 días buscaron obligar a las empresas que hubieran obtenido divisas por esa vía a acudir a esa liquidez para poder cumplir con el pago de importaciones o deudas, buscando penalizarlas, ya que se trata de divisas que fueron adquiridas a precios muy superiores a los que se opera el billete en la plaza oficial.