Deuda. El Fondo respaldó la extensión del canje y reiteró que la Argentina necesita un "alivio"
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LA NACION
WASHINGTON.- Luego de la decisión del Gobierno de extender el plazo para el canje de la deuda, el Fondo Monetario Internacional ( FMI ) volvió a remarcar que es "esencial" que la Argentina consiga un alivio en los pagos a los acreedores y brindó una señal de respaldo a la continuidad de las discusiones en busca de un acuerdo que permita evitar el noveno default en la historia del país.
"Estamos listos para apoyar a la Argentina en estos tiempos difíciles mientras el país busca combatir la pandemia, proteger a los vulnerables y restaurar un crecimiento fuerte e inclusivo. Para este fin, aliviar la carga de deuda insostenible de la Argentina es esencial", indicó un vocero del Fondo a LA NACION, al ser consultado sobre la extensión del plazo para el canje de deuda.
"Nos alienta la disposición de ambas partes a seguir las discusiones para llegar a un acuerdo", agregó.
En el Fondo siguen muy de cerca las discusiones entre el equipo económico del presidente Alberto Fernández y los principales acreedores del país. El staff del FMI ha mantenido contacto con los acreedores de la Argentina como parte de los intercambios habituales que suelen tener los funcionarios del organismo con el mercado. El equipo del Fondo que sigue el caso argentino mantiene también un diálogo fluido con las autoridades, incluidos el ministro de Economía, Martín Guzmán, el representante argentino ante el Fondo, Sergio Chodos, y el embajador argentino en Washington, Jorge Argüello.
En el Fondo reiteraron que las negociaciones "son un asunto bilateral entre la Argentina y sus acreedores" y que no involucran al organismo multilateral. El Fondo espera que el canje tenga una "alta participación". Para refinanciar el préstamo que tomó Mauricio Macri, el gobierno de Alberto Fernández debe conseguir primero que la deuda sea sostenible para firmar un nuevo programa con el organismo.
Antes del inicio de la negociaciones y de la presentación de la oferta del Gobierno, que sufrió un fracaso rotundo al ser rechazada por la mayoría de los acreedores del país, el staff del Fondo preparó una nota técnica a pedido del Gobierno en la cual indicó que la deuda pública del país es "insostenible", y estimó que era necesario un alivio en los pagos de la deuda en al menos US$55.000 millones durante la próxima década. Esa nota generó malestar entre los acreedores del país.
En su análisis, el Fondo dijo que existían "muchas combinaciones de parámetros de reestructuración de la deuda" entre recortes al capital de los bonos, extensiones de vencimientos, períodos de gracia y recortes de las tasas de interés que podrían proporcionar el alivio necesario en los pagos. Para los acreedores, el recorte en el cupón de intereses y el período de gracia de tres años resultó imposible de digerir. En el mercado criticaron también la falta de credibilidad de la oferta, que llegó sin un plan económico, y además postergó la carga de la deuda para las futuras administraciones.
Tras el fracaso de la primera oferta del Gobierno, los principales fondos aguardan ahora un llamado formal a través de los asesores financieros de la Argentina para comenzar una nueva ronda de negociaciones.
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