
Empresas regionales, ahora más que nunca
Por Carlos D. Tramutola (Para la La Nación )
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Las turbulencias recientemente ocurridas en la economía brasileña han generado algunas dudas sobre la continuidad del Mercosur, las cuales afortunadamente tienden a disiparse teniendo en cuenta la gran mayoría de opiniones que lo considera una herramienta de importante valor para el desarrollo de las naciones que lo conforman. Pueden surgir también dudas sobre la viabilidad y la conveniencia del proceso de regionalización de empresas, que en muchos casos es incipiente.
Mi opinión es terminante: aquellas empresas locales que tienen planteada una estrategia de regionalización deben avanzar por ese camino con mayor energía que antes. Hay por lo menos cuatro razones que fundamentan esta opinión: 1) El continuo crecimiento del comercio regional potencia cada vez más la posibilidad de conformar núcleos de desarrollo de características regionales en muchas actividades. El comercio entre países de América latina ha crecido al 20% anual durante los últimos 7 años y el intra-Mercosur, al 26 % anual.
2) Aunque la competencia se ha globalizado, al mismo tiempo se va facilitando el acceso a los capitales, materiales, tecnologías e información, lo cual permite competir adecuadamente a las empresas en diversos sectores de la economía.
3) Para que una empresa sea competitiva en la economía moderna importa más la productividad que alcanza, que el acceso a los factores de producción o su escala individual. La dimensión regional puede contribuir significativamente a mejorar la productividad y al mismo tiempo conservar buena parte de las ventajas competitivas más duraderas basadas sobre el conocimiento local, las redes de relaciones y la capacidad de motivar a la gente.
4) Si aun así se teme por los eventuales comportamientos dispares que entre las economías de los países de la región se puedan generar en el futuro, las empresas regionales podrán tener más flexibilidad que las locales para responder ante cada cambio y optimizar su operación conjunta.
Una empresa que tiene todas sus actividades en un país y exporta a otros es solamente una empresa exportadora. Una empresa es regional cuando compite regionalmente, vende en varios países y establece diversas actividades en ellos. Las actividades que localiza en cada país son generalmente alguna parte de la cadena de valor: operaciones, logística, comercialización, desarrollo tecnológico, abastecimiento, gestión de recursos humanos u otras.
En resumen, una empresa es regional cuando piensa regionalmente todo (sus mercados, sus insumos, su gente, su tecnología), aunque siempre conservando la necesaria dosis de sensibilidad local.






