Interlagos cruza los Andes

CIPOLLETTI.- Tras haber ampliado su distribución a toda la Patagonia y liderar segmentos del mercado en la región, la embotelladora patagónica Interlagos va por más: este mes comenzará la exportación a Chile.

Sin duda la devaluación local y la consiguiente diferencia cambiaria ofreció una oportunidad en la crisis que la empresa supo aprovechar con una rápida respuesta al cambio.

Pero esta etapa de fuerte expansión no es una movida coyuntural. La reconversión al mercado exportador es fruto de la adaptación al nuevo escenario por parte de una estructura con 40 años de trayectoria, que le ha permitido consolidar su liderazgo y fortalecer un modo de hacer el trabajo.

Tras algunos años de actividad independiente, "a partir del 15 noviembre del 64 y hasta el 30 de abril 2001, fuimos la embotelladora de Pepsi en la región", explica Néstor García, cabeza del clan que maneja la empresa con un aire familiar que es una de sus principales fortalezas.

García recorre diariamente la planta ubicada en Cipolletti, única del país con inyectora para hacer los envases, desde medio litro a dos litros y medio. En ella, cada mes se embotellan más de dos millones de litros de bebidas con sabor y un millón de agua con y sin gas. Para muchos de sus 160 empleados es "Don Kity": el 20 por ciento permanece desde su inauguración y el 60 tiene más de 25 años.

Su estilo familiar de dirección tuvo mucho que ver en la decisión que tomó cuando hace un par de años comenzaron a correr rumores sobre la transformación de PepsiCo en una SRL. La apertura a nuevos accionistas que moverían el eje del interés de los negocios hacia Brasil le hizo prever un futuro en el que apostar a la independencia era la carta más riesgosa, mientras que desaparecer para dejar el camino abierta a la provisión desde Buenos Aires era la alternativa más lógica. "Decían que estaba loco... y en realidad, ¡lo siguen diciendo!", asegura García; pero si algo tenía claro era que no iba a desintegrar la pequeña comunidad formada.

Mirando hacia el Oeste

Cuando finalizó su relación con la compañía multinacional se abrió un nuevo panorama. Actualmente, lidera el mercado de agua mineral y soda en la región; en bebidas con sabor, abastece el 22 % de la demanda en Río Negro y Neuquén, mientras que el 50% es de Coca Cola y el resto corresponde a segundas marcas de empresas extranjeras o marcas propias de hipermercados.

Interlagos no se vende en los híper "porque imponen condiciones de oligopolio", y confía en la fidelidad de la cadena de distribución minorista, a la que llega con una red de 450 concesionarios y distribuidores en la Patagonia y la costa bonaerense.

En este proceso de expansión se encontraba cuando la devaluación puso a su disposición un mercado de tres millones de personas a la mitad de la distancia que debe cubrir para llegar a Comodoro Rivadavia. Y sin pensarlo demasiado, apostó nuevamente: confía en que su aparato productivo y la experiencia comercial le ayudarán a compensar la falta de financiación que limita todo proyecto exportador.

"Los planes son captar un 10% del mercado de las colas y bebidas con sabor, desde Santiago de Chile hacia el Sur: Concepción, Temuco, Osorno... En un año podríamos estar colocando un millón de litros de nuestras gaseosas y de agua mineral", indica.

Así, lanzará las marcas "Interlagos" y "Bardas del Limay" como primera y segunda marca. Su investigación en sabores se pondrá a prueba en la oferta de los gustos cola, naranja, lima limón, pomelo blanco y rosado, manzana y pera. Y en aguas, presentará la "Barda de Santo Tomás", embotellada en esa localidad neuquina, cercana a Piedra del Aguila, donde baja de la montaña con un contenido de sodio bajo, que le permite estar entre las únicas 10 marcas que pueden ostentar esta condición, requerida en cuidados cardíacos.

La comercialización se organizará de manera similar al esquema que rige en el mercado nacional, con una red de distribuidores chilenos que se ha ido organizando pacientemente en los últimos meses. "Hicimos todos los deberes y estamos preparados para la reacción de los productores chilenos a nuestro desembarco", asegura García.

Por <br/> Por Pablo Costa <br/> Enviado especial

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