Coronavirus: el FMI prevé en la Argentina la peor recesión desde 2009, con una caída del 5,7%

WASHINGTON.- La pandemia del nuevo coronavirushundirá al mundo en la peor recesión desde la Gran Depresión, y el panorama aún puede empeorar. En la Argentina, la crisis provocará una caída del producto bruto interno (PBI) del 5,7% este año, el mayor derrape desde 2009. luego de la crisis financiera global.

Ese pronóstico quedó plasmado en el Panorama Económico Mundial, el informe insignia del Fondo Monetario Internacional ( FMI ), que este año debió ser ensamblado bajo una "extrema incertidumbre", tal como remarca el mismo trabajo, debido a la cantidad de interrogantes sin respuesta que ha provocado la nueva enfermedad, Covid-19, que en apenas tres meses se desparramó por los cinco continentes, y forzó al mundo a encerrarse. "El Gran Confinamiento", fue el título que eligió el staff del organismo este año para enmarcar sus proyecciones.

Debido a la crisis, el desempleo en el país subirá al 10,9%. El Fondo excluyó del informe las proyecciones sobre déficit fiscal, inflación y servicios de la deuda hasta tanto concluyan las negociaciones con los bonistas por la deuda, indicó un vocero del organismo.

Este año, el Fondo prevé que el mundo se contraerá un 3%, peor a la caída del 0,1% de la Gran Recesión de 2009, que siguió a la crisis financiera global. Para 2021, el FMI prevé un rebote con una expansión del 5,8%, pero, así y todo, la pérdida acumulada para la economía global por la pandemia puede llegar a rondar los nueve billones de dólares. Y esa recuperación está atada a que los gobiernos logren controlar el virus.

"A medida que los países implementan las cuarentenas necesarias y las prácticas de distanciamiento social para contener la pandemia, el mundo ha sido puesto en un Gran Confinamiento. La magnitud y la velocidad del colapso en la actividad consecuentes es distinta a todo lo experimentado en nuestras vidas", escribió la economista jefe del Fondo, Gita Gopinath.

"Esto hace que el Gran Confinamiento sea la peor recesión desde la Gran Depresión, y mucho peor que la crisis financiera global", agregó.

Esta no es una crisis tradicional. El Fondo advirtió que sus pronósticos este año se elaboraron bajo una "extrema incertidumbre" porque el futuro de la economía está atado a un puñado de interrogantes: lo que ocurra con la pandemia, el progreso en la creación de una vacuna o tratamientos; la eficacia de las medidas de mitigación; las repercusiones del ajuste en los mercados financieros, y qué ocurra con el consumo y lo precios de las materias primas una vez que el mundo vuelva a la normalidad, cualquiera sean las características de ese futuro incierto.

De hecho, el Fondo dijo que, en un escenario mucho más adverso, en el que la pandemia se estira, la economía global podría llegar a caer otro 8% el año próximo.

"Esta es una verdadera crisis global, ya que ningún país se salva", indicó Gopinath.

Golpe áspero

Para la Argentina, la crisis será particularmente áspera, y profundizará la recesión en la que cayó el país luego de la corrida cambiaria de 2018. En América latina, sólo Ecuador y Venezuela sufrirán una caída mayor.

El FMI proyectó una recuperación para el país del 4,4% para el año próximo, pero ese rebote está atado, al igual que la reactivación global, a que la pandemia cese.

El informe del Fondo excluyó proyecciones sobre el déficit fiscal, los pagos de la deuda o la inflación debido a que son variables que se verán afectadas por el resultado de esa negociación, indicó un vocero del organismo.

"Para Argentina, por motivo de las negociaciones de la deuda en curso con los acreedores privados, se excluyen las proyecciones fiscales, de deuda, servicio de deuda, interna o externa, y de inflación. Una vez concluido el proceso, se espera reanudar la publicación de dichas variables", indicó un vocero del Fondo.

Los principales socios comerciales del país sufrirán una fuerte contracción, drenando el ingreso de dólares frescos. Estados Unidos caerá un 5,9%; la Unión Europea, un 7,1%, y Brasil, otro 5,3%. Y China sufrirá un fuerte freno, al pasar de crecer un 6,1% el año último, a un 1,2 por ciento este año. A la debacle de los socios comerciales se suma la caída en los precios de las materias primas, como petróleo o la soja, que ahogará todavía más a las exportaciones.

A eso se suma la caída en la actividad en el país por la cuarentena. Cada semana de cuarentena tiene un impacto sobre el nivel de actividad, y en las economías emergentes como la Argentina, el "confinamiento" provoca un daño amplificado por la informalidad.

Por último, la Argentina carece de la capacidad de otros países para acceder a financiamiento externo para financiar una expansión del gasto público que brinde un colchón a la economía. Y el país está frente al riesgo de que las negociaciones con los bonistas se compliquen y lleven a un nuevo default.