Vaso medio lleno: las claves del desarrollo a futuro
Los especialistas coinciden en que el país tiene grandes oportunidades de negocio por la demanda internacional sostenida y el capital humano
El encuentro concluyó con una mirada sobre el futuro, que estuvo a cargo de Carlos Pallotti, CEO de Argencon, una entidad dedicada a promover las exportaciones de servicios del conocimiento (que ya significan el tercer rubro en ingreso de divisas), y Fernando Vilella, director del Programa de Agronegocios y Alimentos de la Facultad de Agronomía de la UBA.
Pallotti fue presidente de la Cámara de Empresas de Software y Servicios Informáticos (Cessi) y es un promotor del talento argentino hacia el exterior, pero con base en el país para evitar la "fuga" de talentos. Vilella, por su parte, es un divulgador usual de la actividad del sector y su visita a la redacción del diario lo encontró recién regresado de un viaje de negocios por Angola, ese destino del África que tanto se encargó de promocionar el ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno. "Les puedo asegurar que no dejó una buena impresión", disparó.
Las empresas exportadoras de servicio mueven cerca de US$ 5800 millones desde la Argentina, que evidencia un crecimiento sostenido en servicios legales, contables, multimedia y de software made in Argentina. Pallotti ofrece razones: "Nuestro sistema educativo permite que casi todos accedan a una escuela y a una universidad de manera gratuita. Eso genera gente capacitada, que tal vez no está siendo instruida en lo que la Argentina necesita en materia productiva, por lo que hoy producimos más intelectualidad de lo que el país demanda. Ese talento queda subempleado o migra, a menos que convirtamos este stock de intelectualidad en un valor exportable, pero que permanezca aquí".
Si se mira hacia adelante, como lo hace Vilella, el panorama parece alentador en materia de agronegocios: "Sólo un 10% de la población del mundo vive en países con excedentes de alimentos. En el futuro habrá un crecimiento muy fuerte en la demanda y no se prevé que otros países se agreguen al club que ya componen Estados Unidos, Canadá, Nueva Zelanda, Australia, Ucrania y los países originarios del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay). También se espera un fuerte incremento de la demanda con valor agregado, como platos preparados fuera de casa o ricos en proteínas. Dependerá de nosotros cuánto aprovechemos estas oportunidades que se vienen".
Ambos expertos se encargan de levantar el ánimo del público con ejemplos de empresas exitosas. "Casi todos los estadios olímpicos de Londres se realizaron con ingeniería desarrollada desde Buenos Aires, y ahora esa misma empresa continuará con los estadios para la Copa del Mundo de Qatar, en 2022. American Airlines, por ejemplo, tercerizó su sistema de check-in con una empresa que tiene base en Córdoba; la firma norteamericana Best Buy se vale de publicidad que se administra y se produce desde aquí; y Accenture, a nivel global, delega sus contratos en el tercer estudio de abogados del país. También hay desarrollos en enclaves productivos, siendo grandes empresas o muy pequeñitas", contó Pallotti. A su juicio, este desarrollo debe lidiar con un asunto pendiente: la infraestructura en telecomunicaciones, fundamental en la sociedad del conocimiento.
Vilella da cuenta de otros procesos también exitosos: ingenieros argentinos desarrollaron máquinas agrícolas que irán hacia Angola, el país que tiene la mejor relación de suelo cultivable y agua per cápita, pero que importa el 80% del alimento que consumen sus habitantes, por falta de mano de obra calificada. En el futuro, según explica, dos tercios de la población de China –unos 1300 millones de habitantes– generarán una demanda enorme de alimentos que la Argentina estará en condiciones de abastecer si antes desarrolla la infraestructura necesaria, acompaña con inversiones y capacita e integra a más profesionales. "En 2040, e l 60% de los alimentos se consumirá en restaurantes o estarán precocidos para consumir en los hogares", remarcó. Un tema recurrente: agregar valor a la producción local.
Para Vilella, la Argentina guarda más potencial en su materia gris que en su materia prima. "El recurso natural en sí mismo es una ventaja, pero si no se agrega conocimiento, recursos humanos y tecnología, no habrá excedente. Nuestro pool tecnológico es importante, estamos exportando y enviamos tecnología y conocimientos", definió este académico, convencido del potencial que tiene el país "si acaso cambian las condiciones de inversión" y se fomenta la formación de recursos humanos. "En el país se gradúa un ingeniero cada 10.000 habitantes; en China, uno cada 2000. Contra ellos deberemos competir a futuro", ejemplificó.
Pallotti también puso sus peros en materia educativa. "Tenemos 2,5 millones de estudiantes en universidades e institutos superiores. Casi la mitad está carreras que no tienen aplicación en el terreno práctico. Necesitamos geólogos, agrimensores e ingenieros", dijo. La industria de servicios, según contó, depende para su desarrollo de unidades académicas que provean personal calificado.
Para ser competitivos, Pallotti insiste en corregir la inflación. "No podemos valer 10 un día, luego 12 y después 14, porque el mundo no lo entenderá jamás", protestó. Y para el empresario es necesario comprender y actuar según la permeabilidad que los distintos negocios pueden tener frente a los cambios de la macro. "Si hago una película, el costo será relevante, pero no tanto como un centro de servicios que instale una compañía en el país, y que de un año a otro incremente sus gastos fijos un 20%", explicó.
Vilella hizo foco en la competitividad: "El tipo cambio es una parte, si bien es cierto que estamos en un desbalance entre el valor del peso y del dólar. Pero sólo con eso no vamos a arreglar mucho. Si no bajamos costos, no hacemos infraestructura, no tendemos redes informáticas o de energía y no prevemos que tenemos que dejar de exportar soja para llegar a enviar productos más elaborados, no avanzaremos". Con todo, como recuerda Pallotti, "los empresarios son navegantes y se acostumbran a trabajar con viento de todos lados".
lanacionarMás leídas de Economía
Desregulación. Con nueve aviones, otra empresa sale a competir con vuelos regulares en el interior
Quieren crecer 100%. Un matrimonio produce carne en plena sierra con un modelo que da sorprendentes resultados
Negociación. Caputo llegó a Washington con la misión de encaminar el nuevo acuerdo con el FMI