Cambio radical: tras renunciar a la política, Pablo Iglesias abandonó su famoso peinado

A una semana de anunciar que dejaba todos sus cargos políticos, en las últimas horas el español Pablo Iglesias, exlíder de Podemos, sorprendió con otra decisión que apoyo su nuevo camino, su cambio de rumbo: se cortó el pelo casi al ras y abandonó su famoso peinado de cola.

El cambio de imagen parece que será seguido por un nuevo perfil, con el que el exvicepresidente del gobierno español (quien saltó al centro de la escena política como heredero del movimiento de los indignados y de las masivas protestas antiausteridad de 2011) buscará regresar a la docencia y desempeñarse como periodista, de acuerdo con lo publicado por el diario La Vanguardia.

El pelo de Iglesias, de 42 años, siempre fue tema de debate político en España: primero dentro de su partido, antes de las elecciones generales de 2015, cuando se preguntaban si un look como ese podía influir o perjudicar el voto; después también se lo trató cuando llegó al gobierno como vicepresidente segundo, aunque entonces la idea de un posible corte tampoco prosperó.

Y es que su pelo fue un símbolo. De hecho, según su entorno, el año pasado Iglesias ya había pensado en cortárselo pero sus colaboradores le habían hecho ver que representaba un símbolo de la irrupción de Podemos en la política y por eso siguió adelante con su look aunque sí hizo una pequeña modificación: empezó a recogerlo con un rodete.

Su decisión de ahora es coletazo de la que tomó días atrás, cuando anunció que abandonaba la política. “Dejo todos mis cargos, dejo la política entendida como política de partido e institucional. Seguiré comprometido con mi país, pero no voy a ser un tapón para la renovación de liderazgos”, dijo el referente de la izquierda española tras la victoria de la presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien competía contra él en las elecciones regionales de Madrid.

En ese momento había asegurado que “cuando uno deja de ser útil, tiene que saber retirarse”. Antes, en marzo, había abandonado el Ejecutivo del presidente socialista, Pedro Sánchez, al que se había sumado en enero de 2020, para competir en Madrid y tratar de impulsar a Podemos.

Pero su intento fue un fracaso. Pese a la alta participación, los partidos de izquierda se vieron arrollados por la derecha en la región capitalina, que la gobierna desde hace 26 años, y Podemos debió contentarse con un quinto lugar y 7% de los votos.

Iglesias, profesor de Ciencias Políticas, se vinculó con la política desde muy joven. De hecho su nombre homenajea al fundador del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pablo Iglesias Posse. Es hijo de una abogada y de un inspector laboral encarcelado durante la dictadura de Francisco Franco (1939-1975). Con 14 años se unió a las juventudes comunistas, una militancia que lo llevó a interesarse por los movimientos antiglobalización y el nuevo socialismo surgido en América Latina.

Su pasión impulsó su carrera académica: es también doctor en Ciencias Políticas, licenciado en Derecho y magíster en Comunicación. Por cinco años dictó clases en la Universidad Complutense de Madrid, donde conoció a quienes fueron después núcleo fundador de Podemos y donde se espera pueda regresar ahora, en esta nueva aunque conocida etapa.