Coronavirus: las camas de cuidados intensivos se acercan al límite de su capacidad en EE.UU.

NUEVA YORK.- En El Paso, los hospitales informaron la semana pasada que solo 13 de las 400 camas de cuidados intensivos estaban libres. En Fargo (Dakota del Norte), solo había tres. En Albuquerque, ninguna. Más de un tercio de los estadounidenses viven en áreas donde los hospitales se están quedando sin camas de cuidados intensivos disponibles, según muestran datos federales, que revelan una imagen detallada de la crisis hospitalaria del país durante la semana más mortífera de la pandemia.

Los hospitales que atienden a más de 100 millones de estadounidenses informaron tener más del 85% de ocupación la semana pasada, según un análisis de The New York Times de los datos reportados por los hospitales y publicados por el Departamento de Salud y Servicios Humanos.

Muchas áreas están aún peor: uno de cada 10 estadounidenses, en una gran franja del medio oeste, sur y suroeste, vive en un área donde las camas de cuidados intensivos están completamente llenas o menos del 5% de las camas están disponibles. En estos niveles, los expertos dicen que mantener los estándares de atención existentes para los pacientes más enfermos puede ser difícil o imposible.

"Nuestra atención de primera línea puede ofrecer ayuda hasta un punto, particularmente cuando se llega a estos condados rurales que están siendo golpeados por la pandemia en este momento", dijo Beth Blauer, directora de los Centros para el Impacto Cívico de la Universidad Johns Hopkins.

Los fuertes aumentos en los pacientes con Covid-19 pueden abrumar a los hospitales más pequeños, añadió. "Esta enfermedad progresa muy rápidamente y puede volverse muy fea muy rápido. Cuando no tienes esa capacidad, eso significa que la gente morirá".

El nuevo conjunto de datos, publicado el lunes, marca la primera vez que el gobierno federal ha revelado información geográfica detallada sobre pacientes con Covid-19 en hospitales, algo que los funcionarios de salud pública han dicho durante mucho tiempo que sería crucial para responder a la epidemia y comprender su impacto.

Las cifras de hospitalización recopiladas por el Proyecto de seguimiento de Covid muestran que el número de personas hospitalizadas con el virus en todo el país se ha duplicado desde principios de noviembre. Pero las cifras a nivel federal han ocultado grandes diferencias dentro de los estados, lo que dificultaba el reconocimiento de los puntos calientes locales.

Los nuevos datos muestran que algunas áreas, como Amarillo en Texas, Coral Gables en Florida, y Troy en Michigan, están experimentando tasas de hospitalizaciones que se acercan a los niveles observados en la ciudad de Nueva York durante las peores semanas de la primavera boreal.

Los líderes políticos de muchos estados están intensificando las medidas para intentar frenar la propagación. La semana pasada, California emitió órdenes de quedarse en casa para las regiones donde los hospitales superaron el 85% de ocupación de cuidados intensivos. Se espera que la gobernadora Michelle Lujan Grisham de Nuevo México, donde las UCI están llenas en todo el estado, pronto anuncie que los hospitales pueden racionar la atención en función de quién tiene más probabilidades de sobrevivir.

Las tasas de supervivencia de la enfermedad han mejorado a medida que los médicos han aprendido qué tratamientos funcionan. Pero la escasez de hospitales podría revertir esos avances, y el riesgo de otro aumento las tasas de mortalidad es cada vez mayor, ya que los pacientes no pueden recibir el nivel de atención que necesitan.

Thomas Tsai, profesor asistente de política de salud en la Universidad de Harvard, dijo que cuando los recursos están críticamente limitados, los trabajadores de la salud que ya enfrentan el agotamiento se ven obligados a tomar decisiones emocionalmente desgarradoras sobre quién recibe atención.

Hay algunas pruebas de que los médicos ya están limitando la atención, dijo el Dr. Tsai. Durante las últimas semanas, la tasa de pacientes ingresados ha comenzado a disminuir. "Eso sugiere que hay algunos criterios de clasificación y racionamiento más estrictos sobre quién ingresa, ya que los hospitales permanecen llenos", dijo.

The New York Times