La "militarización" del gabinete de Bolsonaro toma fuerza

RÍO DE JANEIRO.- Cuando falta poco más de un mes para su asunción, la "militarización" del gabinete del derechista Jair Bolsonaro toma fuerza. El presidente electo de Brasil anunció ayer que pondrá al frente de la Secretaría de Gobierno al general retirado Carlos Alberto dos Santos Cruz, el cuarto miembro de las Fuerzas Armadas en ser designado por Bolsonaro para integrar su futura administración, a partir del 1° de enero.

Creada durante la gestión de Dilma Rousseff, actualmente la Secretaría de Gobierno -a cargo de Carlos Marun- tiene estatus de ministerio y, entre sus varias responsabilidades, se ocupa de la articulación política entre el Palacio del Planalto y el Congreso. Pese a su promesa de reducir a la mitad el número de 29 carteras ministeriales que hay hoy, Bolsonaro afirmó que la Secretaría de Gobierno mantendrá su categoría y ya son 15 los titulares confirmados.

Santos Cruz, de 66 años y oriundo de Río Grande, Rio Grande do Sul, está formado en ingeniería civil por la Universidad Católica de Campinas (San Pablo), y llegó al rango de general de división del Ejército, donde se destacó por comandar las misiones de paz de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Haití (2007-2009) y en la República Democrática del Congo (2013-2015). En razón de su reconocida labor en estas operaciones, trabajó también como consultor de la ONU, y el año pasado el presidente Michel Temer lo nombró secretario de Seguridad Pública dentro del Ministerio de Justicia. El exjuez Sergio Moro, designado por Bolsonaro futuro ministro de Justicia, ya había indicado que quería tenerlo en su equipo de trabajo, pero el mandatario electo finalmente le dio un cargo mayor en su intención de montar un gabinete de especialistas.

Así, más allá del propio Bolsonaro, que es excapitán de paracaidistas del Ejército, y del vicepresidente Hamilton Mourão, exgeneral de reserva del Ejército, en el próximo gabinete ya están garantizadas cuatro carteras a cargo de militares: Secretaría de Gobierno, con Santos Cruz; Gabinete de Seguridad Institucional, con el general retirado Augusto Heleno; Defensa, con el general Fernando Azevedo e Silva, y Ciencia y Tecnología, con el teniente coronel de reserva de la Fuerza Aérea Marcos Pontes, el primer astronauta sudamericano en ir al espacio.

Se espera que la presencia castrense en el gabinete crezca aún más, con la posible designación del general Joaquim Brandão al frente del Ministerio de Infraestructura, una de las pocas carteras que aún faltan por definirse.

Por otra parte, ayer se confirmó que Bolsonaro será operado el 20 de enero para que le retiren la bolsa de colostomía que le fue colocada en el intestino luego del atentado con cuchillo que sufrió el 6 de septiembre último durante una manifestación callejera en Juiz de Fora, estado de Minas Gerais. La cirugía estaba originalmente programada para el 12 de diciembre, pero tras unos exámenes la semana pasada los médicos del Hospital Albert Einstein, en San Pablo, decidieron postergarla un poco, ya que el mandatario electo aún presentaba cierta inflamación intestinal.

"Si mejora en ese aspecto [por la inflamación], será operado el 20 de enero", señaló el cirujano Antonio Luiz Macedo en una entrevista con la radio Jovem Pan.

Según Macedo, tras la operación Bolsonaro deberá permanecer en reposo entre 10 y 15 días para su total recuperación. En ausencia del presidente, asumirá sus funciones interinamente el vicepresidente Mourão.

De mantenerse estas previsiones, Bolsonaro no realizaría ningún viaje al exterior durante su primer mes de mandato. El presidente electo brasileño ya indicó que espera realizar sus primeras visitas internacionales a Estados Unidos, Chile e Israel.