Presión a Obama por el embargo a Cuba

WASHINGTON.- Desde gobiernos latinoamericanos hasta lo más alto del poder en Washington, el gobierno del presidente Barack Obama recibió renovados reclamos para que ponga fin al largo embargo económico a Cuba.

La propia ex secretaria de Estado y ex primera dama Hillary Clinton recomendó en su momento al presidente que levante el embargo sobre la isla, según reveló en su libro de memorias.

En la autobiografía -Decisiones difíciles, que saldrá a la venta el próximo martes- Hillary recordó que su esposo Bill Clinton trató de suavizar el bloqueo a la isla, pero no lo logró.

La ex jefa de la diplomacia estadounidense, una de las favoritas para las elecciones presidenciales de 2016, explicó también que al final de su mandato al frente del Departamento de Estado exhortó a Obama a reconsiderar el embargo. "No está alcanzando sus objetivos (...). Está obstruyendo el alcance de nuestra agenda en América latina", le dijo.

"Yo creía que debíamos hacer recaer en los Castro la responsabilidad de explicar por qué siguen siendo antidemocráticos y abusivos", escribió la ex secretaria de Estado.

Por su parte, los cancilleres latinoamericanos, reunidos en Asunción, reclamaron anteayer a Washington que permita la participación de Cuba en la VII Cumbre de las Américas, que se celebrará en abril próximo en Panamá.

Las 34 naciones presentes, todas las del continente menos la propia Cuba, trataron el tema del país caribeño en un encuentro privado celebrado en el marco de la reunión ministerial de la Organización de los Estados Americanos (OEA), en el que la única disonancia fue de Estados Unidos.

Washington se opuso a la participación de la isla en la próxima cumbre continental, pero no condicionó su asistencia a la presencia de Cuba.

La embajadora de Estados Unidos ante la OEA, Carmen Lomellin, fue quien defendió la postura de su país en el pleno de la Asamblea.

"Deseamos que llegue el día en que pueda participar una Cuba democrática", dijo la diplomática en una conferencia de prensa.

La Habana fue suspendida en 1962 de la OEA y, aunque se levantó esa medida en 2009, aún no pidió su reincorporación al organismo.

Estados Unidos indicó en varias oportunidades que Cuba no cumple con los requisitos democráticos mínimos para asistir a la Cumbre de las Américas, aunque el gobierno de la isla considera que ese rechazo forma parte del embargo económico que le fue impuesto hace más de 50 años.

Agencias EFE y DPA