Basura energética
¿Basura? ¿Residuos tóxicos? Elimínelos con un soplete tres veces más caliente que el sol, reúna el gas resultante y úselo como combustible. Esto puede parecer una idea salida de la mente de un científico loco, pero el método -conocido como tecnología de soplete de plasma- gana adeptos entre gobiernos y empresas con problemas de tratamiento de desechos.
El proceso es similar al del tubo fluorescente, pero a 16.649ºC. Los sopletes de plasma descomponen los desechos en piedras parecidas a la obsidiana y en gases ricos en carbono e hidrógeno. Japón se está convirtiendo en líder de esta tecnología. La compañía Startech Environ-mental ofrece pruebas gratuitas para el tratamiento de desperdicios en Nueva York, según informa la agencia Reuters, y no son pocos los anotados.