El álbum doble revés/yosoy fue una sorpresa para los desprevenidos, pero un regreso esperado para los pocos –aunque fervientes– admiradores que Café Tacuba tiene en la Argentina.
El álbum doble revés/yosoy fue una sorpresa para los desprevenidos, pero un regreso esperado para los pocos -aunque fervientes- admiradores que Café Tacuba tiene en la Argentina. En 1994, el disco Re -segundo en su discografía- presentó al cuarteto mexicano como uno de los grupos más creativos y personales que la cultura rock había generado al sur de los Estados Unidos. Pero su ambicioso nuevo trabajo lo puso a la altura de los mejores artistas del mundo. Revés es un disco de música instrumental en el que ct se permitió hacer público su espíritu experimental. Allí -con invitados de lujo como el Kronos Quartet- confluyen mágicamente sus influencias folklóricas y sus instrumentos acústicos con el tecno rock y la música incidental. En Yosoy, en cambio, hay canciones. Oscuras, inquietantes, reflexivas, llenas de preguntas y con una música austera pero bellísima, que resume como nunca antes la idea del mestizaje entre las raíces latinoamericanas y la percusión electrónica. Eso no es todo: como para dejar claro que sus bríos artísticos no acaban en la música, Café Tacuba filmó un mediometraje mudo con los sonidos de Revés como protagonistas. Tanta producción sirvió para que el grupo cosechara encendidos elogios en la prensa internacional y volviera a ser propuesto como candidato a los Grammy de los Estados Unidos. Más allá de los premios y las buenas críticas, alcanza con poner sus discos para advertir que Café Tacuba es una de las bandas más originales del planeta. Y que su Revés/Yosoy es la mejor producción discográfica internacional de 1999.
Ruben Albarran: No sabemos cómo nos toman los medios; yo no lo descubro. Algunos periodistas nos toman como grupo pop. Es bien raro el sentimiento. Porque uno conoce su propia historia, pero llegas a un país y tu historia nace a partir de un nuevo momento, y lo que tú has seguido haciendo resulta medio descontextualizado. Nos hemos enterado ahora de que la canción de Leo Dan ["Cómo te extraño"] llegó a un público pop y que eso, en la Argentina, te cierra otras puertas.
-¿Ustedes dirían que "Revés/Yosoy" no es un disco pop?
Ruben: Si le quieres buscar una etiqueta, es pop: tú lo escuchas y es pop; pero si quieres llamarlo rock, como actitud, el álbum también es muy rock. Nosotros nos sentimos mucho más rockeros en cuanto a la actitud. En realidad, elegimos hacer "Cómo te extraño" porque para nosotros era como burlarnos de los rockeros, de los que se dicen rockeros de forma. O sea: el rock está en todas partes. No sé cómo será en la Argentina, pero, en México la verdadera movida rockera es la música grupera. El rock llegó a nuestro país como moda de chavos de clase media alta. Y decir estas cosas es rockero y provocador. Es una actitud que tuvimos desde el principio, cuando tocábamos canciones de Agustín Lara, o cuando, como no usamos batería, escuchábamos que los rockeros nos decían: "¿Cómo que no tienen batería? ¿Qué hacen? ¿Menudo?" (risas).
Joselo Rangel: En México la gente se enteró de nosotros porque se corrió la voz. El primer acercamiento fue de boca a boca. En cambio, en la Argentina, lo que preocupa a la disquera es llegar directamente a medios masivos, y eso siempre te hace dudar de lo que estás escuchando. Dices: "Si a este grupo lo están pasando todo el día todos los días, yo dudo de él".
-¿Es algo que les preocupa o asumen la situación como algo normal?
Ruben: Y, sí, es para preocuparse, pero no debes dejar que eso influya en tu proceso. Nosotros, de cierto modo, tratamos de dar algunos consejos sobre cómo marketear, pero se sale mucho de control porque... ¿Quién sabe si en la Argentina, o en Chile, están haciendo lo que nosotros propusimos hacer? Muchas veces el grupo puede tener ideas, pero luego se va confundiendo todo, como en ese juego del teléfono descompuesto; desde el momento en que tú pasas esa información al manager, ya comienza a haber errores. Pero volviendo a lo que se conoce del grupo, quién sabe, ¿no? También se puede caer en una subestimación. Porque si conoces el grupo por "Cómo te extraño" y compras Avalancha de éxitos, allí está el antecedente de "Perfidia", en una versión instrumental. Y, de alguna forma, lo que hoy hacemos es la evolución de lo que practicamos en Avalancha. Por ese lado, Avalancha tiene para nosotros una importancia fuerte. Después hicimos la música instrumental para el cortometraje de Chilanga Banda, música incidental, que dura unos 10 minutos. Eso no salió, no se difundió, pero usamos casi los mismo recursos. Y de ahí pasamos a Revés. Así es la evolución.
-Es fácil definir a "Revés/Yosoy" como un álbum "maduro". Las letras son reflexivas y profundas, el sonido es cada vez más personal. ¿Se plantearon la necesidad de adaptarse al paso del tiempo y a la edad?
Joselo Rangel: Sí, uno reflexiona sobre eso, pero nunca se sabe cómo hacerlo. Decíamos: "Qué mejor que hacer una música que represente la edad que tenemos". Es decir, no tocar una canción que jale a un público que tiene diez o quince años menos que tú. Pero queríamos que la música surgiera de manera natural, y que a la vez nos representara como cultura y como músicos. Cuando nos reunimos, a principios de 1998, no sabíamos qué iba a surgir. Y decidimos hacer algo que muchos grupos hacen pero que nosotros nunca habíamos hecho, que es palomear, hacer jams. Hasta hubo cambios de instrumentos. Mi hermano [Quique Rangel], que es bajista, esta vez tocó todos los demás instrumentos, y tocó el bajo sólo en una canción. Emanuel [Del Real] no tocó más que puras secuencias y guitarra; no tocó mucho el teclado. Lo mismo con Nrü [Rubén Albarrán], que tocó el teclado y otras cosas. Y yo toqué la guitarra eléctrica. Hasta entonces, por una cuestión de búsqueda, había tratado de tocar todo con guitarra acústica, con pedales y todo, pero con acústica. Y ahora no, me fui a tocar todo con guitarra eléctrica. Fui y compré unos efectos sin saber cómo sonaban. Y así fue como trabajamos, sin saber de lo que se trataba ni lo que íbamos a hacer. Y eso nos dio la libertad de hacer lo que quisiéramos, y al mismo tiempo generó esa música que nos puso como en la edad en que estamos. De todos modos, creo que, aunque yo quisiera, no podría volver a componer una canción como las que compuse para el primer disco, que eran como más punk. O más bien teníamos el rollo de que éramos punks (risas).
Ruben: Y en lo musical, de alguna manera, la mezcla que hemos hecho cada vez va tomando un cariz diferente y está más asentada. Las influencias y los elementos que manejamos son menos obvios y más sutiles.
-Durante mucho tiempo no se supo nada de Café Tacuba, y hasta se dijo que se habían disuelto. ¿Cuánto tuvieron que ver los conflictos entre ustedes en "Revés/Yosoy"?
Ruben: No fue nada grave, pero hizo falta para entender el resultado al que llegamos con Revés. Son cosas totalmente naturales que imagino suceden en cualquier asociación humana; es obvio que existan fricciones. Y te adaptas. A tu hermano no le vas a cambiar su manera de pensar, así como él no va a cambiar la tuya. Y cada quien tiene su visión de las cosas. Es importante pensar: "Estoy consciente de que esta persona es así y que yo soy de esta forma, y de que no coincidimos en ciertos puntos, pero lo más importante es que en la creación seguimos estando bien". Esa fue una de las lecciones de Revés.
-¿Ya no hay riesgos de separación?
Joselo Rangel: No nos preguntamos hasta cuándo seguiremos. Estamos juntos, damos entrevistas, salimos a tocar y todo. Y aparte de lidiar con nosotros mismos, con la creación, también hay cosas alrededor con las que se tiene que negociar, como son la exposición en los medios, o las disqueras. Saber hasta dónde me cae mal la persona y hasta dónde estoy influido por el resto y empiezo a odiar al que está al lado sólo porque no tengo tiempo para desarrollar mis otros proyectos no musicales, o porque odio estar de gira o extraño a mi mamá.
-Resulta difícil creer que "Revés/Yosoy" haya sido compuesto por personas que hace poco no sabían mucho de música...
Joselo Rangel: Nosotros llegamos a cosas que a mucha gente le resultan extrañas o muy complejas, pero lo hacemos de manera intuitiva, no porque sepamos que con tantos compases hacemos tal cosa. La historia es más o menos era así: antes de que Emanuel entrara en el grupo, con Rubén y mi hermano Quique tuvimos una etapa de hacer canciones. En ese momento, Quique era el más músico de los tres, pero no había estudiado mucho. Y con Rubén estábamos más en el concepto, íbamos a la facultad de diseño. Cuando entró Emanuel, él pasó a ser quien más co- nocimientos musicales tenía. En algún momento, Rubén y yo entramos en la escuela, para leer música y eso. Pero no seguimos, así que no sabemos tanto.
-Al igual que en sus tres discos anteriores ("Café Tacuba", de 1992; "Re", de 1994; y "Avalancha de éxitos", de 1996), en "Revés/Yosoy" volvieron a trabajar con Gustavo Santaolalla en la producción artística. ¿Cuál fue su participación esta vez?
Joselo Rangel: El nos ve un poco como a sus hijos, y creo que esa relación de padre e hijos es rara. Como somos cuatro, cada uno tiene una conexión diferente con Gustavo, pero confluimos en el trabajo. Gustavo fue el productor de Yosoy, como antes. Pero en Revés compartió la producción con nosotros y Aníbal Kerpel [socio de Santaolalla]. Fue así porque nos encerramos; era necesario resolver nuestras inquietudes y proble- mas entre nosotros cuatro, solos.
-"Yosoy", el disco de canciones, ¿fue condicionado por el sonido de "Revés"?
joselo: Sí, de alguna manera. Las canciones estaban grabadas a nivel walkman desde hacía mucho tiempo, y cuando nos juntamos y pusimos los casetes para ver qué había desde la época de Avalancha, ni nos acordábamos. Y, de alguna manera, el sonido fue influido por el otro disco. Igualmente, en los demos ya había unas guitarras de Rubén así como muy abiertas, unos acordes que no sé cómo los hace pero que me gustan muchísimo (risas). Y también Emanuel estaba jugando con un teclado nuevo que se había comprado; en realidad, no fue tanta la diferencia. Lo que sí pasó es que queríamos que cualquier sonido que hiciera falta fuera generado por nosotros. Así que lo hicimos solos, sin músicos invitados.
-¿En qué están trabajando ahora? ¿En canciones, o en música instrumental?
Joselo Rangel: ¿Quién sabe, no? Cada quien trabaja individualmente. Yo diría que estamos en algo como Revés. Y las canciones, todo eso que se vaya generando, no sé adónde va a ir a quedar.
Más leídas de Espectáculos
“Mis padrinos fueron Mariano Moreno y Sarmiento”. Mirtha recordó su casamiento y se sumó a los chistes sobre su edad
Un jarrón, secretos y guiños entre una expareja. Las “felicidades” de Adrián Suar y Benjamín Vicuña: cómo es la obra que ya era un éxito antes de su estreno
"Soy otra". El look invernal de Juana Viale que dio que hablar: peinado wet, abrigo oversize y guantes largos