La pasión por los "fierros" en la familia Grimaldi se inició con Luis II, que apoyó la inauguración del Gran Prix de Mónaco, en 1929. En estos tiempos, es Andrea Casiraghi (34), el hijo mayor de Carolina de Mónaco y tataranieto de aquel príncipe, quien heredó tal fascinación, a la par de su hermano Pierre (30). Pero como Andrea vive en Londres –junto a su mujer Tatiana Santo Domingo y sus tres hijos, Sasha, India y Maximilian–, no puede disfrutar de la colección de autos clásicos que creó su abuelo Rainiero III. Entonces, se las ingenia para circular por la capital británica con simpleza. Algunas veces se lo suele ver en subte y cuando el clima se lo permite, en skate. Pero ahora sumó un "vehículo" a su colección: un onewheel –transportador de autoequilibro eléctrico– que está valuado en 1.400 dólares.
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