Los nuevos reyes de estilo: Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo

Empezó la cuenta regresiva… A un mes de convertirse en marido y mujer, Pierre Casiraghi (27) y Beatrice Borromeo (29) dijeron presente en el majestuoso casamiento de Noor Fares, conocida joyera del jet set, con Alexandre Al Khawam en la iglesia de Saint Catherine, ubicada en Honfleur, Francia. En un paisaje de ensueño a orillas del río Sena, Pierre y Beatrice dieron cátedra de estilo y volvieron a regalarse innumerables gestos de amor. De boda en boda –también brillaron a fines de mayo en el casamiento de Joseph Getty y Sabine Ghanem en Roma–, los novios de Mónaco "ensayan" para su propio casamiento, que ilusiona al mundo con dos capítulos. El primero será el 25 de julio en el Palacio Grimaldi en Mónaco. El segundo sucederá en la isla Bella en el lago Maggiore el 1 de agosto. Andrea Casiraghi (31) y Tatiana Santo Domingo (31) –quienes fueron con Sacha (2), el mayor de sus dos hijos– compartieron este momento con ellos como una suerte de preámbulo de lo que se vivirá dentro de algunos días en el principado.

EL DIA SEÑALADO

Desde que empezaron su relación, hace siete años, se convirtieron en una de las parejas más fotografiadas del mundo. Y es que juntos logran una combinación cinematográfica: belleza, juventud y estirpe. Pierre, hijo menor de la princesa Carolina de Mónaco, pertenece a la dinastía Grimaldi, que ocupa el trono de Mónaco desde el siglo XII, mientras que Beatrice desciende de una de las familias aristocráticas más tradicionales de Italia. En diciembre del año pasado, "los novios del año" se comprometieron –él le regaló un impresionante anillo de brillante rosa engarzado en oro blanco– y desde entonces, todos han soñado con el día de su boda. Si bien en un principio habían anunciado que sería el 20 de abril, los novios la postergaron para que coincidiera con las vacaciones de verano en Europa. La ceremonia civil será el sábado 25 de julio a las doce del mediodía en los jardines del Palacio Grimaldi. La boda religiosa y la gran fiesta se celebrarán una semana después –el 1 de agosto– en las islas Borromeas, propiedad de la familia del conde Carlo Ferdinando Borromeo, padre de Beatrice, donde también se casaron sus hermanas mayores, Isabella, Lavinia y Matilde.

Fieles al hermetismo que los caracteriza, ni los protagonistas ni palacio confirmaron la fecha, ni siquiera aun cuando la semana pasada circuló en algunos medios italianos una invitación a la ceremonia en Mónaco con el sello del principado. Andrea Casiraghi, hermano de Pierre, también guardó bajó siete llaves los detalles de su boda con Tatiana Santo Domingo que constó de dos partes: el 31 de agosto se casaron por civil en Mónaco y el 1 de febrero dieron el sí por Iglesia en Gstaad, Suiza.

UNA ISLA DE CUENTO

En el lago Maggiore, al norte de Italia, emerge un pequeño archipiélago adquirido por la familia Borromeo, entre 1439 y 1447, para formar el estado Borromeo. Vitaliano VI, en el año 1650, inició la construcción del palacio y el diseño de los impresionantes jardines. Los Borromeo son aún propietarios de dos de sus islas, la Isla Bella y la Isla Madre, ubicadas frente a la localidad de Stresa, y dos islotes donde se encuentran los castillos de Cannero. En Isla Bella se levanta un palacio del siglo XVII en forma de barco y en Isla Madre se dibuja un magnífico jardín romántico de estilo inglés, considerado uno de los mejores ejemplos de arte de jardinería que también alberga numerosas especies orientales de flora y fauna. Además de estas "perlas flotantes", la familia de Beatrice tiene Rocca di Angera, una majestuosa fortaleza que se alza sobre uno de los acantilados del lago. Fue justamente la hermana mayor de Beatrice, Isabella Borromeo, la que eligió ese lugar para una de las recepciones de su boda con el magnate del petróleo italiano, Ugo Brachetti Peretti. Luego, en 2004, Lavinia se casó con John Elkann Agnelli, presidente del grupo Fiat, en Isla Madre, donde hay una capilla. Y por último, en 2011, Matilde dio el "sí, quiero" en Isla Bella con el príncipe Antonius von Fürstenberg. Al parecer, Beatrice sueña con celebrar su casamiento en aquella isla con arquitectura y jardinería de inspiración barroca. Su nombre, "Bella", tiene un significado de por sí romántico: Carlo III Borromeo la llamó así en honor de su esposa Isabella d’Adda.

Texto: Paula Galloni