Violeta Rivas fue una de las grandes protagonistas de la televisión de los 60

Como la mayoría de las figuras del Club del Clan que lograron trascender aquél exitoso ciclo utilizándolo como trampolín para futuras carreras exitosas, Violeta Rivas mezcló en su carrera televisiva el canto y la actuación, dos facetas para las que estaba realmente dotada. Su protagonismo televisivo coincidió con la etapa artística triunfal de su carrera, a lo largo de toda la década del 60.

El Club del Clan la tuvo entre sus grandes estrellas desde que arrancó por la pantalla de Canal 13 en 1962, en el horario central de los sábados (las 20.30). Y desde allí no sólo se afirmó por su cristalina voz y su simpática y natural desenvoltura. También vivió una historia de amor que viajó rápidamente desde la pantalla chica hasta la vida real y perduró hasta hoy. La pareja que surgió en aquél tiempo entre Rivas y el cantante de tangos Néstor Fabián se convirtió rápidamente en la más popular de la Argentina, sólo superada por la de Palito Ortega-Evangelina Salazar.

Tanto quería saber el público lo que vivían Rivas y Fabián que en tiempos de fuertísima competencia entre los programas ómnibus de los sábados, Canal 13 utilizó como parte de su estrategia el anuncio del casamiento entre ambos. No se hizo en cualquier momento, sino en el tramo final de la transmisión que Pipo Mancera hizo al frente de sus Sábados Circulares de la boda entre Palito y Evangelina. En ese momento el rating del programa superaba los 45 puntos. Fue el 2 de marzo de 1967. El 16 se casaron Rivas y Fabián también ante las cámaras de Canal 13, con uno de los picos de audiencia televisiva más altos de todo ese año.

Dos años después, a lo largo de casi todo 1964, Rivas y Fabián protagonizaron junto a otros ex miembros del Club del Clan (Chico Novarro, Johnny Tedesco) la telecomedia Todo esto es amor, por Canal 9. Después llegaron algunos proyectos en solitario para Rivas, ahora en neta clave actoral: Primero Las chicas, en 1965, comedia dirigida por David Stivel en la que Rivas compartía aventuras juveniles con Selva Alemán y Estela Molly. Y al año siguiente Vivir en el aire, con puesta en escena de María Herminia Avellaneda, en la que Rivas interpretaba a una azafata. Casi por decantación, en 1966 tuvo con su marido ciclo propio en Canal 13: Violeta y Néstor. Desde allí, la presencia televisiva de Rivas se redujo a un par de comedias más de fugaz paso por la pantalla y apariciones regulares (sola o junto a su marido) en los programas ómnibus de su tiempo o en cabalgatas nostálgicas, cada vez más espaciadas en las décadas siguientes.