Sabina, Páez y Milanés en Madrid

Un rato después del show, que fue también la grabación del nuevo disco/DVD de Fito, en los pasillos del backstage, allí en el Palacio de Congresos de Ifema (Madrid) se vive un clima de alegría. El concierto salió mejor de lo esperado y en los alrededores del camarín de Páez se percibe que allí dentro hay un encuentro histórico.

Acaba de pasar a saludar Jorge Drexler (que acompañó a su pareja, la actriz y cantante de Marlango, Leonor Watling); Mavi Díaz va de un lado para el otro, el Bebe Contepomi se junta con Coki Debernardis, hay algunos jugadores de fútbol (Maxi Rodríguez, Leo Franco), Ale Ros comienza a imaginar el arte del disco, Ariel Rot se va temprano (al día siguiente, dará una conferencia de prensa sobre el regreso de Tequila) y Afo Verde, presidente de Sony BMG y director de este proyecto, también celebra con iluminadores, sonidistas y odo el equipo que sostiene la performance del artista. Un verdadero circo beat.

En el camarín de Páez, Sabina recibe la edición del décimo aniversario de Rolling Stone Argentina, celebra (y se alegra). “Es la única de las ediciones de Rolling Stone que me puso en su portada”, anuncia y, alegre como está, pide un brindis.

Páez, y Milanés alzan la copa y, en ese clima de festejos, transcurre una antológica y divertidísima charla entre tres amigos que, juntos y por separado, conforman una columna vertebral de la canción en Iberoamérica.

“No sólo hemos estado juntos; hemos estado revueltos”, anuncia, eufórico, Joaquín Sabina. Y es sólo el comienzo.

Luego, Milanés se adjudica una suerte de padrinazgo sobre Enemigos íntimos, el disco que Sabina y Páez grabaron juntos hace una década. Y Sabina lo ratifica. Siempre, claro está, en un clima de infinita alegría.

Por Humphrey Inzillo (enviado especial a Madrid)

Mirá la charla en camarines entre Joaquín Sabina, Fito Páez y Pablo Milanés