El tercer disco de la banda liderada por Manza Esaín y la felicidad efectiva
Canciones para ser feliz. No para reír sino para sonreír; esbozar una mueca mental, esa que simboliza la extraña sensación que experimentamos cuando todo está sospechosamente bien. A pesar del destello de melancolía, las canciones de Valle de Muñecas son cien por cien efectivas: esas melodías pegadizas, esos arreglos de viola que reflejan una insoslayable absorción brit pero que al mismo tiempo se imponen como registrados, Manza y esa voz; esa tonalidad que nunca, ni incluso esforzándose para lograrlo, puede resultar agresiva. Y, bueno, Causa: VDM - Consecuencia: felicidad no constituiría una deducción irrefutable sino fuera por esos versos. La autopista corre del océano hasta el amanecer, su tercer disco y el sucesor del genial Folk (2007), emana poesía desde el mismísimo título y ataca desde cada track la sensibilidad romántica de los que saben escuchar con el cuerpo y con la mente. Con la ayuda imprescindible de su compañera Flopa Lestani (que colaboró en la composición de “Gotas en la frente” y “Cuentos para no dormir jamás”; recordarán cuando evocamos a FMM), Manza habla de “la cicatriz que dejan los silencios” (“Mapas”), “caricias de luna” y “besos de cristal” (“Ni un diluvio más”) o de poder dormir en retinas hasta el fin del día (“Dos”), sin absoluto temor a la cursilería.
Mientras se erige siempre con su perfil bajo como uno de los productores e ingenieros más destacados de la escena indiegámica (Mentettes, Nikita Nipone), Mariano "Manza" Esaín o nuestro Paul Weller oculto, como lo llama Oscar Jalil en la reseña del disco de la RS de septiembre, se pone una vez más al frente de este cuarteto de violas de acordes soleados. Explora algunos cuelgues más noise, como en "Vanidad", por ejemplo, y se anima a suaves tres por cuatro como en esa canción de cuna-valsecito que es "Cosas que nunca te digo". VDM, con el exquisito reflejo del sonido de grandes como Teenage Fanclub o Wilco que lo caracteriza, vuelve a triunfar en su humilde empresa: al menos el tiempo que dura un disco, hoy todos seremos felices.
Dejo "Gotas en la frente" y los insto a ir a por el resto: