Qué significa DUI en EE.UU. y por qué una persona podría terminar en la cárcel

En Estados Unidos, conducir bajo los efectos del alcohol es un delito y tiene como consecuencia que el infractor sea arrestado o incluso que se vea involucrado en un accidente de tránsito que cause lesiones graves o la muerte. Acerca de este tema, manejar en estado de embriaguez se le conoce popularmente como DUI, pero mucho no saben a qué corresponden esas siglas.

El significado de DUI en EE.UU.

Driving Under Influence es el acrónimo de DUI y se refiere a conducir en estado de ebriedad. En tanto, también existen otras siglas, DWI, que son las iniciales de Driving While Intoxicated (DWI). Los dos términos implican manejar luego de consumir alcohol, drogas u otras sustancias.

De acuerdo con el Legal Information Institute: “Estos abarcan el impedimento de conducción peligrosa causada por el alcohol, las drogas u otras sustancias controladas”.

En los estados del país, los dos términos a menudo se usan coloquialmente de forma indistinta, aunque generalmente los cargos por DUI se refieren a casos de consumo del alcohol, mientras que los de DWI son aquellos por uso de drogas recreativas o recetadas.

La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (Nhtsa, por sus siglas en inglés), señala que cada día, alrededor de 37 personas en EE.UU. mueren en accidentes por conducir en estado de ebriedad. Es decir, una persona cada 39 minutos. Agregan que “alrededor del 31% de todas las muertes por accidentes de tránsito en los Estados Unidos involucran a conductores ebrios”.

Sanciones y consecuencias de DUI y DWI en EE.UU.

De acuerdo con Justia, un sitio web especializado en la recuperación y recolección de información legal, cada estado prevé las sanciones para las condenas por conducir en estado de ebriedad. La mayoría dan cierta libertad para una primera infracción y permiten que se impute como delito menor, pero las consecuencias “pueden ser importantes en caso de condenas múltiples y cuando existen factores agravantes”.

Las sanciones que una persona puede enfrentar en Estados Unidos si es declarada culpable de DUI incluyen: prisión, multas, evaluación y tratamiento obligatorios de alcohol, servicio comunitario y libertad condicional. Por su parte, la Nhtsa explica que los cargos van desde delitos menores hasta delitos graves y las sanciones por conducir bajo los efectos del alcohol pueden incluir también la revocación de la licencia de conducir.

“Una primera infracción puede costarle al conductor más de US$10.000 en multas y honorarios legales”, asegura la agencia del gobierno. Como una forma de evitar los accidentes por DUI, algunos estados exigen que los infractores que instalen dispositivos de bloqueo de encendido en su vehículo, para que no se pueda operar a menos que el conductor sople y tenga un nivel por debajo de un límite establecido.

Los agentes del orden pueden pedir a los conductores que se sometan a pruebas químicas de aliento, sangre u orina, siempre que sospechen que el conductor tiene alguna discapacidad para la conducción de su vehículo. Esta sospecha suele surgir cuando un oficial presencia un manejo peligroso o errático.

El Legal Information Institute señala además que la mayoría de las infracciones por conducción bajo los efectos del alcohol se imputan después de que un alcoholímetro o un análisis de sangre indican que el contenido de alcohol en sangre (BAC, por sus siglas en inglés) está por encima del límite federal del 0,08%. No obstante, la ley estatal puede imponer un límite legal más bajo.

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