El mesías alternativo está solo

MILAN.- Perry Farrell, de 43 años, mítico cantante de Jane´s Addiction y de Porno For Pyros, se presenta en el salón de un hotel lujoso, a la hora pactada. Su estampa mezcla el cuerpo fibroso y los ojos cansados de Iggy Pop, la elegancia de seda barata de Jarvis Cocker (líder de Pulp), el cerebro limado de Lux Interior, de los Cramps, los devaneos espirituales de Cat Stevens y el carisma de Bono. El motivo del encuentro: un disco nuevo, el primero que graba sin grupo. Tecno-rock envolvente y atmosférico, colosal mezcla de rock primitivo, máquinas y sonidos mundiales.

El argumento de Song Yet To Be Sung (Canción para ser cantada) : la hermandad de las naciones, la paz y el amor totales. Todo ello a través de una idea bíblica: el Jubileo. El que fue el tipo más intenso de la escena angelina en los últimos tiempos; el hombre que unió a góticos, metaleros y punks; el ex yonqui que prefiere que no fumes.

- Tu nuevo disco y tus últimas apariciones giran en torno del Jubileo. ¿Puedes explicarlo?

- El Jubileo es una ley que se remonta a los tiempos de Moisés. Cuando los israelitas cruzaron el río Jordán, fueron llamados a celebrar un gran festejo, liberar a los esclavos, renunciar a todas las deudas, practicar el perdón, devolver las posesiones a sus dueños originales y dejar descansar la tierra. Empecé a estudiarlo, a meditar cada día sobre el tema y a preparar música. Comencé a tejer una red mundial con gente como Bono, el Papa, Bob Geldof y Thom Yorke. Estuve en Israel cuatro veces para preparar el Jubileo del año próximo. El verano último empecé a organizarlo en América y este, voy a estar de gira con Jane´s Addiction.

- ¿No es un poco comprometedor hablar de abrir mentes, devolver tierras y liberar esclavos en una gran fiesta en Israel cuando este país tiene en jaque a los palestinos?

- Sí, es cierto. En cinco años de trabajo en este tema, comprendí que cuanto más cerca estemos del Jubileo, mayores serán los obstáculos. Estás hablando de un asunto muy complicado, que tiene detrás una historia que se remonta a la fundación de Israel. Pero puedo darte una respuesta: Jubileo. No veo otra. Hacer una fiesta y juntar a gente de 70 países, con su música, y ver cómo va. Es algo que no se ha intentado nunca. La paz va a llegar.

¿Devaneos? Tal vez. Pero atención: la asociación Jubileo 2000, de la que Farrell es director artístico, ha conseguido que se descuenten cerca de 6000 millones de dólares de la deuda del Tercer Mundo.

- Todo este discurso tiene su reflejo en tu disco, que mezcla rock, sonidos mundiales y electrónica.

- Moderno y primitivo: eso es excitante. Es muy polvoriento, pero tiene tecnología. El primer hombre hizo la música con un palo.

- El lanzamiento de Song Yet To Be Sung coincide con la reunión de Jane´s Addiction. Da la impresión de que tenés una relación amistosa con tus viejos amigos.

- A veces no tan amistosa, y a veces tanto como la de dos amantes. En la intimidad musical hay algo tan poderoso que es capaz de romper relaciones sexuales estupendas. En mi caso pone a todas las mujeres muy celosas cuando nos juntamos de nuevo. Esta reunión es refrescante: es como tener un amante durante mucho tiempo, pero sin haber estado casado. Por lo demás, se puede decir que echaba de menos mi lado rockero.

- En una de tus nuevas canciones lanzas la pregunta: "¿Te has olvidado de quién eres?"

- Mi nombre es Peretz [su nombre hebreo]. Me he hecho esa pregunta y definitivamente me la he contestado. Me alegra conocer la respuesta, porque de otro modo sería una pérdida de tiempo que me dejaría exhausto.

- Se te suele presentar como chamán del rock y visionario. ¿Te identificas con esos términos?

- Honestamente, hay momentos en los que me siento un esclavo. Porque trabajo con gente que me presiona para trabajar más y más duro. Pero también me digo: tú eres el único responsable, porque no hay reglas que digan que tengas que hacerles caso. No creo que debas forzar a la gente. Pero lamentablemente ciertas cosas deben asegurarse en este mundo. El Sabbat es importante. La tierra es importante. Pero lamentablemente, la tierra parece no tener voz. La voz debe salir.

- ¿Cómo convencerías al incrédulo lector de que no eres otro rockero colgado que escapa de las drogas, abraza la religión y lo cuenta en su último disco?

- A veces llegas a un lugar del que tienes que volver, que se llama teshuva [arrepentimiento]. Para volver debes convertirte en un hombre o mujer justo. No soy sólo yo, somos tú y yo y todo el mundo, porque estamos sujetos a principios universales. Puedes reventarte la cabeza contra ellos o decir, OK. El resultado es la búsqueda de la armonía. No creo que sea diferente de nadie.

Perfil del personaje

• En 1984 creó Jane´s Addiction, una de las bandas de Los Angeles más importantes de aquella década, que logró su punto más alto en 1990, con el disco Ritual de lo habitual.

• Inquieto por naturaleza, Farrell inventó eso de "festival itinerante" y lo bautizó Lollapalooza, el megaevento de rock alternativo más grande del mundo. Luego formó Porno For Pyros y armó y desarmó Jane´s Addiction a su antojo.

• A los 43 años, edita su primer álbum solista y se convierte en un iluminado esotérico. Aunque también lucha por el perdón de la deuda del tercer mundo.

Por Bruno Galindo

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