Pronóstico del tiempo: la lluvia vuelve a casa
Después de varios meses con déficit hídrico el otoño cortó la racha con algunas lluvias esporádicas. Ahora, envalentonado, se anima a colocar cuatro días seguidos con probabilidad de precipitaciones, hasta con lugar para algunas tormentas. Si bien desde el punto de vista urbano representará algunas complicaciones para moverse por la calle, que se mojen los papeles al salir de la oficina o llevar a los chicos a la escuela, hay que celebrar el regreso de las precipitaciones frecuentes a nuestras latitudes. La lluvia, injustamente etiquetada como “mal tiempo”, vuelve por su revancha a partir de hoy y puede hacernos cambiar todos los planes para el fin de semana.
Jueves: lluvias, día uno
Bienvenidos al primer casillero de la hilera de jornadas inestables, el jueves no solo abre la saga sino que puede representar el día con más lluvia de todos. Ya desde temprano estaremos expuestos a chaparrones y tormentas, así que si los eventos se demoran y llega seco al trabajo, considérelo como una verdadera gentileza. Se espera un amanecer con cielo nublado y amenazante, viento moderado y un piso térmico de 21°C. A pesar del comienzo templado el termómetro casi no progresará a lo largo del día, logrando una máxima de 23°C por la tarde. Todas las franjas horarias estarán solapadas por la inestabilidad pudiéndose esperar tormentas intermitentes desde la mañana hasta el atardecer con lugar para algunos pasajes sin precipitación y con diferentes ritmos de lluvia . Si bien la noche conserva la probabilidad de precipitaciones se estima menos inestable, pudiéndose esperar lluvia más débil o un momentáneo cese de la misma.
Viernes: sigue encapotado
Para el viernes se espera otra jornada inestable aunque con un ritmo de lluvia mucho menor. Se esperan precipitaciones aisladas para todo el día, pero con mejoras temporarias más marcadas, los tramos sin lluvia pueden durar horas y los momentos con algún chaparrón pueden ser pocos y muy puntuales, un escenario muy diferente al del día anterior. Sigue el viento moderado, ahora desde el sudeste, afloja la cobertura nubosa desde el amanecer en un arranque con 20°C, en otro día de acotada amplitud térmica con el termómetro apenas escalando hasta los 23°C. La noche no se encuentra completamente a salvo aunque en las simulaciones parece abrirse una ventana sin lluvias antes de la medianoche.
Sábado: el nubarrón no se rinde
Al igual que el fin de semana pasado, el sábado podría presentar varios tramos con lluvias donde la mañana sería el momento menos inestable de la jornada. El termómetro sigue sin moverse en un amanecer nuboso con 19°C, algunos modelos de simulación ponen a resguardo el comienzo del día pero algún chaparrón aislado no estaría fuera de libreto. La tarde estará más receptiva a una nueva tanda de precipitaciones y hasta se le puede dejar abierta la puerta a un evento vespertino de lluvias fuertes. Se espera una máxima de 23°C en una jornada con viento leve desde el Este, lo por lo que el mercurio sigue sin caer. La noche puede presentar lloviznas aisladas y hay lugar para que un cese de precipitaciones les permita a muchos no cancelar alguna salida nocturna.
Domingo: tarde con ráfagas
La jornada dominical es la menos inestable de toda la fila pero igual podemos ligar algunos chaparrones a lo largo del día. La mañana conserva el cielo nublado de los últimos días con un amanecer de 18°C y viento moderado del sudoeste. Parece difícil sacar la mesa afuera al mediodía y la tarde mostrará al termómetro un poco más abajo, condicionado por la falta de sol y el viento frío, recortándose en 20°C. Promediando el día comienza un evento de ráfagas frías, podríamos zafar de la lluvia pero no del fuerte viento que puede desalentar cualquier plan de salir a dar una vuelta.
Spoiler alert
La semana entrante muestra un descenso de temperatura con amaneceres más frescos con 15°C de mínima. No se esperan lluvias, el cielo se limpia recién el martes para darnos varios días consecutivos a pleno sol con máximas agradables que no bajarán de los 23°C.
Eso es todo, amigos y amigas. Hay que aclarar que entre el viernes y el domingo la ventana de inestabilidad no es de lluvia continua. Podría suceder que todo termine en un fiasco con apenas unas gotas puntuales así que vayan resolviendo sobre la marcha. Solo hoy jueves y la tarde del sábado parecen ser los tramos más comprometidos. Es bueno recordar que estamos en el período de “tormentas equinocciales” que también son conocidas como “tormentas de transición”, el pasaje del verano al otoño presenta un desfase entre el polo sur y el Río de la Plata, es decir, una zona se comporta con una configuración invernal mientras la otra conserva algún sesgo estival; esta diferencia puede dar lugar a eventos de tiempo severo. Si nos ponemos a revisar la estadística, los peores eventos meteorológicos en el estuario se dieron entre finales de marzo y comienzos de abril, si bien no esperamos nada extremo hay cierta cautela porque siempre suele llover mucho más de los que marcan los algoritmos. Como siempre, nos posicionaremos en el escenario más pesimista para que nada nos sorprenda, método que aconsejo trasladar a todos los órdenes de la vida.
Hasta la semana que viene.
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