La princesa Amalia habló de los íntimos motivos por los que decidió empezar terapia
Los reyes la llevaron por primera vez cuando era niña; “La salud mental es tan importante como la salud física”, aseveró
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Amalia, la primogénita de los reyes de los Países Bajos, está por cumplir 18 años, y con la mayoría de edad vienen nuevos cambios en su vida su vida. Como un aperitivo hacia un camino de nuevas responsabilidades, la corona de Orange publicó una biografía de la princesa con motivo de su cumpleaños, una tradición que su abuela Beatriz cumplió en 1955 y su padre, Guillermo, en 1985. En el libro, la futura monarca habla de sus pasatiempos, su familia, recuerdos de la niñez y un tema poco abordado en la realeza: la salud mental.
Y es que en las conversaciones con Claudia de Breij, humorista y presentadora -a quien los reyes dieron a principios de año la tarea de relatar la vida de la princesa con la intención de generar un mayor acercamiento con los holandeses-, la princesa habló de sus visitas al psicólogo y de cuándo tiene la necesidad de acudir por sentirse “sobrecargada”, un tema tabú durante años en las distintas monarquías en el mundo.
Fue así como Amalia relató en el libro que lleva su nombre. “No creo que ese sea un tema tabú. Y no tengo problema en decirlo en público”, expresó la princesa en su biografía. “A veces todo se vuelve demasiado para mí, la escuela, los amigos... Por eso hablo con alguien. Si siento la necesidad, hago una cita para desahogarme y estar lista para otro mes”, explicó la joven, quien consideró a la salud mental tan importante como la salud física.
Gracias a algunos de los fragmentos del libro, se pudo saber que la princesa acudió a un psicólogo infantil cuando era niña gracias a la decisión de sus padres y ahora, cerca de su mayoría de edad, forma parte de sus hábitos.
“Creo que hablar con un profesional de vez en cuando es bastante normal, sobre todo después de lo que le pasó a mi tía”, relató la princesa en referencia a Inés Zorreguieta, hermana de la reina Máxima, quien se suicidó en 2018 cuando tenía 33 años.
“Recibimos la noticia y fui a la escuela ese día. Me vestí mejor que de costumbre y me maquillé… Como una capa de pintura sobre algo que está roto”, le reveló Amalia a Claudia de Breij.
Sin embargo, la muerte de Inés no fue la única tragedia en la familia. Su tío Friso, hermano del rey Guillermo, murió en 2013 luego de pasar 18 meses en un coma inducido tras un accidente en una estación de esquí austriaca, que le causó daños cerebrales irreversibles.
El próximo 8 de diciembre, un día después de su cumpleaños, es una fecha marcada en rojo en el calendario de los Países Bajos, ya que inicia una nueva etapa en la vida de Amalia, quien será presentada por su padre por primera vez ante el Consejo de Estado. A partir de ese momento, la princesa ocupará “por derecho” un puesto en ese organismo con miras a la preparación de su rol como futura heredera del trono holandés.
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