Tom Ford y su gran despedida de Gucci
MILAN (Reuters y AP).-- Ovación y pétalos de rosas caían desde el techo: la última colección de Tom Ford para Gucci se convirtió, la semana última, en una despedida triunfal. Sin duda, la presentación más emotiva de los desfiles otoño-invierno 2004/2005. "Estoy muy conmovido, pero intento controlar mis emociones. Gucci es una parte de mi vida", dijo Ford después del desfile.
En 1990, el diseñador, aún bastante inexperto, se unió a la empresa florentina y creó con una mezcla de glamour y sensualidad una de las marcas más trascendentes de los años 90. Durante esa década, Ford exploró el terreno del rock, el cine, la provocación, el punk y los trajes de época, y dictó tendencias de moda en todo el mundo.
En su desfile de despedida, rindió homenaje a sus primeras colecciones, con vestidos largos de noche en raso, muy años 40, ajustados y abiertos en los laterales; faldas estrechas, cinturones anchos y zapatos altos, acompañados por cuellos de zorro; pantalones de encaje transparente o chaquetas de grandes solapas que imitan el smoking, y sencillos modelos blancos abiertos a la altura de la cadera recordaron la colección del invierno 1996/97, considerada una de sus obras maestras. El público, en muchos casos, no pudo contener lágrimas de emoción y al final irrumpió en un larguísimo aplauso. Las negociaciones fracasadas con el principal accionista de Gucci, Pinaul-Printemps-Redout (PPR), hicieron que esta exitosa historia llegara ahora a su fin. Si en 1993 el grupo, con una facturación anual de 200 millones de euros, tenía pérdidas, diez años después facturaba 1500 millones de euros, con más de 450 millones de beneficios.
Muy elogiados
Junto al diseñador abandona Gucci el presidente del grupo, Domenico de Sole, que también en noviembre último anunció su dimisión a los propietarios de la sociedad. De Sole, presente en el desfile, aseguró que los últimos diez años de duro trabajo junto a Ford han sido "una aventura extraordinaria", y admitió que los conjuntos que desfilaron fueron creados "entre lágrimas". Muchas de sus nuevas creaciones fueron entendidas como una especie de retrospectiva de su exitosa década en Gucci. Mientras tanto siguen las especulaciones sobre su sucesor. En los últimos días fueron varios los diseñadores mencionados como posibles sucesores. El tiempo dirá.