
¿Cambió Cambiemos?
Parece tiempo suficiente para indagar cómo Juntos por el Cambio procesó, procesa o espera procesar la derrota electoral. ¿Es necesario modificar algo, en tal caso qué, para retomar el poder? ¿Cambiemos fue una alianza electoral que necesita reformarse en posible alianza de gobierno? ¿Será esto el pecado original que pavimentó la posterior derrota? ¿A qué intereses socioeconómicos intentó representar y por qué perdió su apoyo? Si Cambiemos se postuló como representante de los intereses de la clase media, hay que indagar acerca de la naturaleza del sector a representar. ¿Representa solo a sectores medios de grandes centros urbanos como CABA y Córdoba? ¿Tiene algo que ofrecer a los habitantes de La Matanza o Río Gallegos? ¿Puede representar a sectores medios cuyos ingresos provienen del Estado en forma conjunta con los que se nutren del sector privado, o ambos tienen intereses muy difíciles de conciliar bajo una representación unificada, sobre todo ante un Estado que clama ser reestructurado tanto por sus ineficiencias como enormes dificultades para ser financiado? ¿Cuáles son las propuestas que puedan entusiasmar a la juventud? ¿Existía entre los socios una visión estratégica conjunta de la Argentina, y en tal caso, sigue vigente? ¿Cuáles son las reformas estructurales que se necesitan y cuál la estrategia para ejecutarlas? ¿Hubo intentos de modificaciones estructurales en la gestión anterior? ¿Es necesario y posible profundizarlas? ¿Cuál es la agenda de prioridades? ¿Qué capital político se requiere para su implementación? Existe una pregunta, en apariencia obvia, que sin embargo conviene plantearse: ¿importa que Cambiemos continúe como alianza política?
¿ "Sí se puede" fue tan solo un slogan de marketing o había un encuadre ideológico? ¿Por qué lo que se pudo tiene un amargo sabor a muy poco?
¿ "Sí se puede" fue tan solo un slogan de marketing o había un encuadre ideológico? ¿Por qué lo que se pudo tiene un amargo sabor a muy poco? ¿Fue por inconsistencias ideológicas, errores de ejecución, ausencia de un programa con visión estratégica hacia donde ir, falta de coordinación para ejecutar programas demasiado dispersos, endeble sistema de toma de decisiones entre sus socios? Aprendiendo de los errores del pasado, ¿cómo restablecer confianza entre los posibles electores?
¿Es Macri quien debe liderar el intento de retorno al poder? ¿Su agenda de prioridades coincide con la de Cambiemos? ¿Se puede ganar las elecciones sin Macri? ¿Alcanza solo con él? ¿Existen dirigentes alternativos? ¿Cómo elegirlos? ¿Conviene realizar cambios ahora o postergarlos?
Una democracia consolidada requiere de alternancia en el poder, lo que implica la existencia de alianzas o partidos políticos con suficiente capacidad de abroquelar una masa critica de electores que otorguen un mandato legítimo para llevar a cabo sus respectivas agendas políticas. Es muy peligroso para la salud de la República que vastos sectores de la ciudadanía perciban que carecen de representación. Intentar representar a los sectores, sobre todo las clases medias, para que continúen confiando en la democracia, sabiendo que cuentan con una estructura partidaria que los contiene con propuestas y líderes con vocación de poder transformador para dejar en el pasado nuestras recurrentes crisis, debería constituirse en la razón de ser de Cambiemos. Resulta imperioso que reagrupe a su tropa, alinee una estrategia, elija una conducción y juegue cuanto antes el partido de un noble accionar político.
Joint Degree en Economía y Filosofía de University College London