De los lectores: cartas & e-mails
Fragmentación; App Cuidar; Cumplir las normas; Límites; Manchalá; La obra de Gauguin
Fragmentación
Si se tiene en cuenta que el coronavirus contagia preferentemente a los adultos mayores y estos constituyen el mayor grupo de riesgo, lo que obliga a su aislamiento social, sería conveniente que las autoridades permitan el acceso al trabajo, con los recaudos pertinentes, a las personas comprendidas entre los 18 y los 60 años. Dicha fragmentación posibilitaría una mayor optimización de la economía.
Mario Segre
mariosegre257@yahoo.com.ar
App Cuidar
Hace un año decían que los policías eran represores y nazis si pedían el DNI en la calle, hoy esos mismos nos piden que bajemos la app Cuidar, si es que ellos te autorizan a salir a trabajar. Cuando respondemos que están violando el artículo 14 de la Constitución Nacional, te contestan que hay un "decreto" dictado por el Gobierno. Solo les recuerdo que en 1975 la presidenta de un gobierno democrático, María Estela Martínez, dictó un decreto y dio una orden... 45 años después, las personas que cumplieron esa orden están presas y siendo juzgadas por una ley posterior al momento de los hechos, violando una vez más la Constitución Nacional, artículo 18. Otro dato: son juzgados por el mismo partido político que dictó el decreto en 1975.
Tengamos memoria y esperemos que en 40 años las Fuerzas Armadas y de seguridad no sean juzgadas por lesa humanidad por los nietos de los Kirchner.
Delfina Alfaro
delfualfaro@hotmail.com
Cumplir las normas
Grande fue la sorpresa cuando el 8 de mayo vimos al Presidente junto al jefe de gobierno porteño y al gobernador de Buenos Aires a menos de un metro entre ellos y sin tapabocas mientras anunciaban la extensión de la cuarentena obligatoria, por la cual los argentinos tendríamos que seguir con el distanciamiento social y otros recaudos que se establecieron desde el 20 de marzo para evitar la propagación del coronavirus. A los 15 días volvimos a encontrarnos con la misma imagen de dichas autoridades al comunicar una nueva ampliación del aislamiento preventivo. En la primera conferencia de prensa un periodista le preguntó a Fernández qué protocolo seguía, a lo que respondió: "Tengo el mismo cuidado que todos deben tener". ¿Sabría que no lo estaba haciendo en ese momento? El viernes pasado, ante la recomendación de un cronista para que use más el barbijo, dijo: "Acá en Olivos estamos todos muy protegidos". Aunque así fuese -difícil saber qué ocurre en la quinta presidencial-, ¿los primeros en cumplir las normas no deberían ser los funcionarios que las dictan?
Belén Moreno Chaile
DNI 42.571.284
Pedro Moreno
DNI 16.730.074
Límites
La Argentina se dio una Constitución para limitar al gobierno, indicándole con precisión qué es lo que puede y qué es lo que no puede hacer. Sin embargo, en la actualidad, en lugar de pedirnos permiso a nosotros, somos nosotros, los ciudadanos, quienes tenemos que pedir cada vez más permisos al gobierno: permisos para viajar, para trabajar, para estudiar, para pasear, para correr. Evidentemente, a raíz de la pandemia, la situación actual está muy lejos de la normalidad, pero preocupa mucho escuchar a funcionarios comentar que difícilmente la recuperemos.
Miguel Gutiérrez Trápani
migutra@gmail.com
Manchalá
Pasaron 45 años ya, eran jóvenes, muy jóvenes. Pelearon con bravura ante un enemigo mucho más numeroso, no se rindieron. Su acción, impensada, fue fundamental para dar vuelta una situación que se venía complicada. Hoy caminan por la calle, me los puedo encontrar en cualquier esquina de Salta, tienen más de 60 y el mismo coraje, vencieron otros enemigos; el olvido y el escarnio. Ante la destrucción del monumento que reconocía aquella gesta volvieron a sacar el pecho y, otra vez, no se rindieron, hasta levantar uno nuevo. Esa nueva batalla ganada dio un nuevo giro a otra situación complicada, demostraron a una sociedad callada, olvidadiza y sumisa que vale la pena luchar por ciertas cosas.
Valientes soldados de Manchalá, en un nuevo aniversario de aquel combate, los saludo agradecido.
Alejandro Patrón Costas
Integrante del Centro de Estudios Salta
DNI 23.079.809
La obra de Gauguin
En el artículo "¿Perverso o genio?", del 24 del actual, se cita la pregunta que se hace una cronista de The New York Times: "¿Es tiempo de cancelar a Gauguin?". Esta cancelación se haría en virtud de que Gauguin se casó con dos jóvenes en Tahití. No me consta que las haya destratado. No hay pormenores de esto. Tampoco hay falta de respeto en las maravillosas imágenes femeninas de Gauguin. La trasnochada feminista que pretende "cancelar" a un genio se olvidó de citar que Gauguin abandonó a su esposa y cinco hijos cuando era un exitoso agente de bolsa para dedicarse a la pintura. Es claro que esto me parece inaceptable. También me parece injusto que la sociedad condenara al pintor a la indiferencia, el desprecio, la miseria y lo dejara morir solo y enfermo. Así murió Gauguin, solitario en una miserable choza hecha con ramas. Al frente de su vivienda había un cartel que rezaba "Casa del Placer". A despecho de la poco feliz sugerencia canceladora, la obra de Gauguin nos sigue deparando un enorme placer estético. Nos legó cantidad de maravillosas obras, que marcaron un camino en la historia del arte. En 2018, se exhibieron en la calle carteles con desnudos de Egon Schiele. La pacatería hizo que se tapara el sexo de las figuras. Parece que no se evolucionó mucho desde que el papa Pío V encomendó tapar el sexo de los desnudos de la Capilla Sixtina, obra de... ¡Miguel Ángel! Desde entonces se conoce a Daniele da Volterra como" Il Braghettone".
"Si nadie se opone a esto, los fascistas de la cultura van a terminar prohibiendo todas las obras de arte de la cultura occidental" (Steve Cuozzo, The New York Times).
Pobre Gauguin.
Horacio Vodovotz
DNI 4.400.219
En la Red
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