Desgracias de los números
Los números están bien, pero su interpretación puede llevar a muchos equívocos. Esto puede estar pasando con el salario real en dólares, con el tipo de cambio, con los precios de muchos productos en dólares y con un sinnúmero de artículos en nuestro país comparados con los de Chile, Miami, New York y los precios de esos productos en otras grandes ciudades del mundo entero.
¿Qué es lo que está mal? Si todos difieren en materia de su costo comparativo en dólares con los precios en otros países, el problema puede ser este último concepto, el valor del dólar en pesos. Esta conclusión no es tan segura, por lo que se requerirá una evaluación de la misma a lo largo del tiempo.
¿Qué se suele usar para evaluar el precio de la divisa? No hay un solo método y, además, aún con la misma metodología, por ejemplo, de la Paridad Teórica de Equilibrios (PTE), hay distintos puntos de arranque que nos pueden confundir.
El enfoque monetario del balance de pagos puede ser otro esquema, es decir, si estamos exportando e importando bien no habría por qué preocuparse por el valor externo de la divisa. Este enfoque se utilizó en alguna medida hacia el final de la convertibilidad.
¿Qué tenemos que usar? No hay una respuesta segura, pero lo lógico es algo parecido a la PTE, aunque el problema es el año base. La PTE que calcula una gran empresa está basada, desde hace muchos años, en un año tomado como base, pero que ahora puede ser diversos años para esta serie. ¿A qué se debe esto? Justamente a que lo que era adecuado para determinados años, después pudo resultar también válido para otros años que daban resultados similares a los del año base.
Consideremos una PTE de largo plazo, por ejemplo, desde 1880 hasta ahora. Este largo período muestra movimientos de divisas que entran o salen del país según las condiciones de administración del valor externo de la divisa. Por ejemplo, en el período 1880 hasta 1930 se produjo una fuerte entrada de capitales que hizo que la PTE fuera relativamente baja en relación al tipo de cambio de mercado.
A partir de 1930 se produce una reversión de esa entrada de capitales y entonces se invierten los movimientos de capitales: lo que normalmente hubiera sido un valor de paridad de la PTE lógica pasa a ser insuficiente y entonces no hay tipo de cambio que alcance. A medida que se mueve más el tipo de cambio se va acelerando ese movimiento del tipo de cambio en relación a la PTE. Esta ya no es la misma PTE que antes, aunque se calcula igual.
Posteriormente se producen pequeños períodos de reversión, como con José Alfredo Martínez de Hoz o con Domingo Cavallo e incluso en los años de los altos precios de las commodities de la década del 2003 -2014 también tenemos una situación parecida, aunque no muy estable.
Medido en moneda de octubre de 2015, los precios se ponen muy dudosos en relación a la PTE y para el futuro tendremos que observar las perspectivas de los precios. La búsqueda de una mejor comparación también se ha dado con la teoría del Enfoque Monetario del Balance de Pagos, que había sido en la práctica un buen enfoque para evaluar si el tipo de cambio estaba bien o se encontraba mal.
Actualmente sabemos que los tipos de cambio están fuera del equilibrio de largo plazo y eso va a requerir un reajuste, una revisión importante. Tenemos que esperar que dicho reajuste se haga después de las próximas elecciones y todo va a estar bien. Debemos hacerlo, la cuestión es a cuánto tendría que ir el tipo de cambio y ya eso es más difícil de prever.