Máximo Kirchner y los piqueteros: la pelea por el voto joven
La necesidad de recuperar el voto joven para el Frente de Todos enfrenta a La Cámpora con los movimientos sociales. Un conflicto que revela la dificultad de la formación conducida por Máximo Kirchner para resolver una contradicción en apariencia insalvable: la imposibilidad de traducir en un caudal significativo de votos la trayectoria ascendente en el Estado para transformarse en una burocracia al comando exclusivo de las cajas del Estado vinculadas a la asistencia social.
El sondeo realizado por Taquión la última semana de julio es un indicio del estado de ánimo en las generaciones Z (menores de 25 años) e Y (26 a 38 años), también conocidos como millennials. Al menos el 43 por ciento de los Z aseguró no tener actividad laboral. El 34,4 por ciento de los Y expresó temor a perder el empleo. Más del 72 por ciento de ambos grupos comparte el sentimiento de preocupación por el futuro. Y también la imagen negativa que tienen de Alberto Fernández, superior al 50 por ciento.
Cristina Fernández de Kirchner divide opiniones. El rechazo a su figura es mayor entre los menores de 25 (64,4%) que entre los de esa edad y los 38 (59, .5 %). El voto joven representa un tercio de los electores, cuya mayor densidad se concentra en el conurbano. Según el Cippec, la falta de trabajo impacta más a los jóvenes que a los adultos. Particularmente a los de menores ingresos. El equivalente al 26 por ciento de esa fuerza laboral está en esa situación.
La desinversión extranjera de los últimos 20 años en la Argentina juega un papel importante. El ingreso de capitales creció apenas dos puntos en ese ciclo. Brasil es el mayor receptor de inversiones en la región, seguido por Colombia, Chile, Perú y Uruguay. El contexto en el que Andrés “El cuervo” Larroque aseguró que la creación de empleo es la única política social efectiva. El ministro de Desarrollo Comunitario de Axel Kicillof es el principal operador político de Máximo en la provincia de Buenos Aires.Un discurso que condiciona a Juan Zabaleta, el nuevo ministro de Desarrollo Social. Larroque es el jefe político de Damián Selci, que lo suplanta como intendente interino en Hurlingham. Zabaleta cedió del segundo al quinto lugar en la lista de candidatos a concejales para que el presidente lo pueda designar. Es la forma que halló La Cámpora para sustituir la falta de inserción territorial. Larroque es el encargado de eliminar ese déficit. La contribución a esa misión de Zabaleta parece garantizada por ese antecedente. O al menos es lo que trasluce su debut: compartió con Larroque la necesidad de transformar los planes en empleo. Por ahora, Zabaleta logró reubicar a dos funcionarios de su confianza en el organigrama. El subsecretario de Asistencia Crítica, Gustavo Aguilera, reemplazará a Erika Roffler en la secretaría de Articulación Social y Pablo País cubrirá la vacante de Aguilera. Roffler sustituyó a Gonzalo Calvo tras el escándalo por el sobreprecio de los fideos.
Calvo y Roffler están ligados al intendente de Almirante Brown, Mariano Cascallares. La disputa entre jefes comunales y piqueteros por la representación de los pobres estructurales con la que convivió Daniel Arroyo podría ingresar en una tregua por la amenaza de La Cámpora sobre los planes sociales. El ex funcionario terminó enfrentado al resto de los ministros. Pero en especial al jefe del Gabinete, Santiago Cafiero, por no recortar la ayuda al frente de izquierda que lidera el Polo Obrero.
Arroyo fue reivindicado por las organizaciones oficialistas en la marcha por San Cayetano. El gobierno sospecha de Emilio Pérsico por sus vínculos con un sector al que también se está acercando Juan Grabois. ¿Por pedido del Papa? Francisco tendría interés en el reclamo que lidera Eduardo Belliboni. Reabrir fábricas para sustituir a los planes con empleo genuino. Un tácito rechazo al salario universal que propone a través de Grabois. Pero una reminiscencia del debate entre Saúl Ubaldini y Raúl Alfonsín en los 80 despierta simpatías en el entorno de Bergoglio. La izquierda se movilizará el 18 para reclamar por los casi 200 mil beneficiarios del plan Potenciar Trabajo que aún no percibieron la cuota de junio. El oficialismo cruza acusaciones por esa demora. Algunos creen que las provoca Pérsico. La mitad de los perjudicados por la falta de pago están inscriptos en organizaciones ligadas al Movimiento Evita. Antes de asumir Zabaleta dialogó con Fernando “El chino” Navarro, otro de sus líderes. El secretario de Enlace Parlamentario reivindicó el 4 de agosto su plan para transformar en empleo los planes de asistencia.
Puso de ejemplo las 500 mil viviendas construidas por las cooperativas de esa corriente “a un precio más económico que cualquier empresa, más rápido y de mejor calidad.” Un planteo rechazado por la CGT: conspira contra los salarios pactados en las convenciones colectivas El Movimiento Evita abona un plus a los beneficiarios del Potenciar Trabajo (12 mil pesos) que participan de esos emprendimientos. Aún así, el haber que perciben es la mitad de la categoría inicial en la escala de la Uocra, equivalente a 60 mil pesos. Por eso en la CGT cayó mal la oficialización del trabajo precario que perciben en el reconocimiento del Ministerio de Trabajo a la personería jurídica de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP). Una medida que los Gordos que controlan la CGT estimaron destinada a moderar el tono duro de los discursos que los piqueteros oficialistas prometían en la marcha de San Cayetano. ¿Los Gordos promueven el rumor del alejamiento de Claudio Moroni? Los saludos enviados a Sergio Palazzo por su candidatura a diputado nacional en la provincia de Buenos Aires podría dar esa apariencia.
El titular de la Asociación Bancaria se habría reunido con Cristina el 22 de julio. El día que se ausentó de la Asamblea en Independiente a la que convocó Hugo Moyano y terminó en un bochorno iniciado con sus furcios al leer un acta. Palazzo renunció a la comisión directiva unas semanas después. Hasta ahora, la alianza de Moyano y Palazzo excede al club de Avellaneda. La CGT elige autoridades en octubre.
El intento de copamiento al palacio municipal de Lomas de Zamora volvió más enrarecido ese clima. Los intendentes del Frente de Todos reaccionaron con rapidez. Se solidarizaron con Martín Insaurralde e instaron al diálogo pacífico. Un mensaje que chocó con los tres allanamientos infructuosos del juez de Garantías N°3, Gustavo Gaig, a locales del Movimiento Teresa Rodríguez en Villa Albertina y el Olimpo.
Representantes de esa corriente y autoridades municipales convinieron el 9 la asistencia a sus comedores sociales. El acuerdo no deja de diluir la sospecha de la aparente intervención atribuida a Julián Álvarez en la agitación de los incidentes. El exviceministro de Justicia compite con Omar Galdurralde por el primer puesto de concejal en las PASO del Frente de Todos en Lanús. La guerra de carteles en las paredes es solo la parte visible de un conflicto más grande.
Galdurralde es titular de la Lotería bonaerense por decisión de Insaurralde. El ministro de Hábitat, Jorge Ferraresi, la intendente de Quilmes, Mayra Mendoza, y la diputada nacional por Lomas de Zamora, Daniela Vilar, asistieron el 10 al lanzamiento de Álvarez. Todos tienen relación con Máximo. Pero también una estrecha relación con Cristina. Aunque más distante con Insaurralde, socio político de Máximo. El hijo que alude a su madre como “la compañera”. La pelea por el voto joven parece recorrer un sinuoso laberinto.